¿Encerrados y con miedo?
"El gobierno nacional, el gobierno de Alberto Fernández, no sólo que demoró en reconocer esta pandemia mundial, sino que al principio intentó minimizarla", señala el autor de la nota.
Como ciudadano mendocino me atrevo a expresar mi opinión. La humanidad entera está siendo azotada por un enemigo desconocido, por un virus denominado covid-19. Esta situación angustia, desorienta. No sólo ataca a la salud sino también a la subsistencia de la ciudadanía.
Este escenario fue contingente, es decir ningún lugar del mundo lo preveía, ni siquiera las grandes potencias mundiales. En momentos como éstos en donde se ve la responsabilidad de las acciones y decisiones de quiénes tienen la obligación de conducir al pueblo, al país, a nuestra provincia.
Esta situación sanitaria lleva alrededor de 8 meses, aproximadamente 240 días. Y es en este período en donde queda en evidencia quienes de nuestros gobernantes cumplen sus funciones con responsabilidad y compromiso.
El gobierno nacional, el gobierno de Alberto Fernández, no sólo que demoró en reconocer esta pandemia mundial, sino que al principio intentó minimizarla. Aprovechó este período para ocultar sus verdaderas intenciones como intentar adueñarse de la justicia nacional, liberar a delincuentes, entre otras tantas medidas que perjudican claramente al pueblo argentino.
En la provincia de Mendoza se actuó con rapidez, con eficiencia y eficacia, se tomaron y se toman diariamente todas las medidas de prevención sanitaria pertinentes. Los hospitales responden a la demanda de los pacientes, los que cuentan con profesionales de excelencia con una vocación de servicio digna de ser destacada.
Este contexto trae aparejado una realidad que no se puede y sobre todo no se debe desconocer, las consecuencias no son solo sanitarias, sino también económicas, en estos casi 240 días que lleva esta pandemia en nuestro país varias personas han perdido su fuente de trabajo, empresas cerraron sus puertas sumado a la gravísima situación que atraviesa nuestro país: 4 de cada 10 argentinos se encuentran bajo la línea de la pobreza. Por este motivo considero, acudiendo al sentido común y a la responsabilidad con la sociedad toda, que Mendoza no debe ni puede cerrarse tal como lo desea el presidente por una decisión caprichosa y con el único objetivo de instaurar el pánico en la ciudadanía, por ello respaldo la decisión de nuestro gobernador Rodolfo Suarez que confía en los mendocinos y respeta los derechos individuales y no convalida a la política del miedo.
EL AUTOR. Gabriel López es Contador Público Nacional. Docente. Secretario Comité Departamental UCR Maipú. Exdirector general de Administración Subsecretaría de Desarrollo Social. Exgerente de Administración Hospital Central de Mendoza.