El mejor saldrá último: un "debate" que no sirve para nada
Se realizó el primer debate obligatorio entre candidatos en Mendoza. Deberá repetirse en 2025, pero no necesariamente bajo este formato.
Sin posibilidad de intercambio de ideas, poco se esperaba de este primer debate obligatorio que se realiza en Mendoza; básicamente, que los candidatos introduzcan, desarrollen y cierren una idea en aproximadamente un minuto. Y de los cinco competidores a la gobernación, apenas uno lo logró una y otra vez: Lautaro Jimenez.
A partir de esto, surge una primera conclusión: se trata de un debate que no es debate, ya que no hay posibilidad de cruces, y que además no sirve para nada porque el candidato que mejor performance tuvo, Jimenez (Frente de Izquierda), saldrá en el último lugar en las elecciones del próximo domingo 24 de septiembre.
Bajo este formato, la incidencia en el votante es nula. Los cinco candidatos a gobernador, y los cuatro a vicegobernador que participaron (no dejaron intervenir a través de un video a Noelia Barbeito, la compañera de fórmula de Jimenez que está bajo un tratamiento médico), básicamente reiteraron lo que ya habían anticipado en actos de campaña. No hubo nada nuevo. Incluso en las chicanas se repitieron.
Si todo el arco político de Mendoza habla una y otra vez del debate entre José Octavio Bordón y Raúl Baglini de 1987 como el mejor de la historia (aunque no hay video público disponible para chequearlo), ¿por qué apuntaron a un esquema totalmente distinto, no sólo por la cantidad de competidores, sino por la falta de debate en sí?
De todos modos, de lo que se dijo y se vio, hubo cosas atípicas que calificaría como perlitas: primero, que Daniel Orozco, sin que nadie se lo pidiera, exhibiera un certificado de antecedentes penales... "Tengo ficha limpia para competir", lanzó el lasherino cuya gestión como intendente es investigada por fraude, abusos sexuales y otros delitos.
Y por su parte, el candidato a gobernador de La Unión Mendocina, Omar De Marchi, ratificó una medida que había prometido en otro acto de la campaña. Dijo que, si es gobernador, pondrá a un policía al frente de la Seguridad, todo lo contrario al espíritu de la reforma que en 1999 aplicó quien era ministro de Seguridad: Alejandro Cazabán, principal asesor de la actual campaña de La Unión Mendocina.
La ley ya está sancionada y en cada año electoral deberá haber un debate entre candidatos, aunque no necesariamente con el formato que se aplicó hoy.