Descrédito social a los políticos mendocinos

¿Va a llegar ese preciso día en que Mendoza despierte? Yo no vengo de la política, vengo del laburo estatal y privado, cuando asumí como concejal del departamento de Godoy Cruz mi primer encuentro con el intendente Costarelli me dejó sorprendido. 

Tras una charla en un recinto de la Legislatura mendocina, dos personajes políticos jóvenes me encrespaban con sus discursos autoritarios y soba lomo, donde en realidad se escuchan ellos y uno los miraba con cara de asombro, de repente sin poder mediar palabra alguna, el mismo aprendiz de intendente concluía su monólogo aburrido donde este personaje creado por Cornejo decía: - "Godoy Cruz lo maneja totalmente Alfredo, ¡te advierto!, todo lo que vos hagas fuera del Municipio es para vos y todo lo que hagas dentro es para nosotros". 

Allí terminó una de las charlas más profundas que he tenido con este principito de la comarca cornejal que solo le interesa conservar el Castillo Municipal cueste lo que cueste, trabajar para el monarca deja sus réditos año tras año y fíjense que siempre son los mismos. 

Un año de gestión y todavía ninguno de los concejales opositores al oficialismo han podido tener cinco minutos de seriedad con el hijo pródigo de Cornejo. A mi edad y poca experiencia política esto me preocupa.

Así estamos en muchas otras comunas de Mendoza se repite la historia, atrapados en un sistema nefasto de caudillaje que intenta con manotones de ahogados conservar cargos, puestos y contratos sin disimulo alguno. Años antes el nefasto Carlos Ciurca dominaba el imperio junto a algunos políticos peronistas, ahora el Club Radicheta liderado por el innombrable "navega en aguas muy profundas" e incluso seduce a Javier Milei con una prensa que ha perdido la cordura a cambio de un buen y abultado billete argentino, pautado sin dudas.

Les recuerdo que Mendoza es sinónimo de Pauta periodística, siempre sus gobernantes han manipulado a nuestra sociedad de norte a sur, de este a oeste, de Zenit a Nadir.

El ciudadano conoce mucho de todos estos entramados, pero tiene miedo de dar su opinión. Creemos que están cansado, así no lo expresan nuestros vecinos de Godoy Cruz. Algunos luchan junto a nosotros hasta desangrarse, pero las heridas son constantes, el desgaste es intenso, sufren constante robos día tras día y la calle es insegura. Existe una sensación de indefensión muy grande en la ciudadanía por la falta de seriedad del Oficialismo. El aparato periodístico que maneja Cornejo es inmenso y muy corrupto, en realidad es una corporación que deberá responder ante los juicios. Mucho dinero corre entre estos bandidos de la mentira, se dice lo que el Gobierno les da órdenes precisas de quienes pueden tener prensa y quiénes no. El segundo lugar es mi caso, me tienen vedado.

Claro ejemplo es la situación de docentes, policías y miembros de la salud mendocina, con quienes venimos batallando desde el año pasado con varias agrupaciones sociales que son las únicas que desempolvan la realidad y construyen conciencia social. Bendiciones y fuerza a todas ellas.

Gracias a Dios la virtualidad permite que algunos opositores a este sistema podamos todavía decir lo que pensamos, pero es tanto el miedo o temor que tienen nuestros ciudadanos que el sistema sigue en pie y se va desmenuzando en forma muy lenta. 

Cornejo es vulnerable sin dudas y ha dejado la provincia endeble, golpeada por la incertidumbre de la inseguridad, impuestos y tasas altas, con una indecencia política que abruma por el autoritarismo y la falta de estrategia social y un cambio generacional que por ser un feudo desestima.

Claro que Mendoza tiene oposición, uno de ellos es el Partido Demócrata La Libertad Avanza con su Agrupación Liberal de Derecha llamada "Defensa Ciudadana", pero reitero, la prensa pautada mantiene una solapa permanente con todos quienes opinan distinto a Cornejo. Otros Partidos no menos importantes mantienen la impronta opositora y otros se hacen los opositores con un libreto cornejial pactado que evidentemente termina dañando la Democracia y República. Claro ejemplo de algunos sellos que manejan títeres en Diputados y Senadores, a cambio de algunos contratos y monedas.

No quiero hablar profundamente de la política influyente que propicia el Radicalismo mendocino con el crimen organizado y narcotráfico. Es evidente que desalentando y menospreciando la profesión policial con bajos salarios y pocos derechos procesales, con docentes enjaulados con salarios magros y una sanidad bastardeada por el poder político, todo esto tiene su razón de ser. Nunca como antes los delincuentes, crimen organizado y narcomenudeo en cárceles zaffaronianas, tuvieron la posibilidad, capacidad y libertad de organización, a escala planetaria, cuyos actores favorecen e integran holdings criminales que se manejan libremente por todas nuestras fronteras porosas y cárceles llenas de celulares, y lo más aterrador son los políticos influyentes los que facilitan con sus inacciones el crecimiento exponencial del delito y la violencia.

El silencio de Cornejo y muchos otros gobernantes relacionados a este sistema facilitador es el claro ejemplo de lo que ocurre en Mendoza. Los vecinos están aterrados, ya no saben cómo agruparse en los diferentes barrios, inventan reuniones periódicas pidiendo auxilio. Hay vecinas y vecinos que viven lindante a criminales narcos que gozan de total inmunidad. La oposición intenta hacer algo, pero el oficialismo bloquea cualquier intento. Esto se cae en cualquier momento. Quienes delinquen tienen garantías y hasta viviendas dignas, caer preso hoy en día hasta te garantiza un escape seguro en alguna comisaría mendocina y las mejores viandas del mercado licitatorio oficial.

Cuando llegan estos tiempos tan violentos, donde la cordura política no existe y son pocos los que recapacitan analizando la realidad, existen muchas probabilidades de que el pueblo, soberano en sus determinaciones, tome las riendas y el toro por las astas. Todo depende del nivel de tolerancia, su historia y por sobre todo del despertar a las ideas de la Libertad propiciadas por nuestro presidente Javier Milei.

Cornejo no es ni se parece a nadie, menos a Javier Milei, es uno de esos tantos personajes que la ciudadanía a creado y ha votado en Mendoza ante el descrédito político que él mismo ha creado y sostenido durante años. Tal vez esta sea la última posibilidad que nuestra hermosa provincia tenga, pero como antes he afirmado, cada provincia y sus ciudadanos tienen lo que se merecen. ¡Viva la Libertad mendocina!