Las 10 actividades sostenibles para hacer con niños en verano

Tiempo de vacaciones, ocio y relajación. Pero con los niños, siempre es necesario un mínimo de planificación de actividades para hacer juntos. Y ya sea trekking urbano, jardinería o juegos al aire libre, lo importante es deconstruir los días y darles la oportunidad de experimentar.

Verano, tiempo de vacaciones, relax, ocio y recarga de energía. Al menos en papel. Para aquellos con niños pequeños, sin embargo, sin un plan de actividades para hacer con los niños en el verano, las largas semanas de sus vacaciones pueden convertirse en una carrera de obstáculos para hacer coincidir el deseo de diversión de los más pequeños con las necesidades de los padres. ' trabajos. He aquí pues un útil apoyo en clave sostenible sobre qué hacer con los niños en verano, cuando están de vacaciones y los padres, quizás, todavía no.

Para aquellos que tienen la suerte de tener una segunda vivienda junto al mar, en el campo, en la montaña o junto al lago, el verano es un momento en el que, con solo mudarse a la casa de vacaciones, se rompe la monotonía del año. En estos casos, el verano para los niños tiene sabor a amistades reencontradas, conocidos de vacaciones en la playa, vecinos con sombrilla y juegos con los niños del pueblo de los abuelos. Y los meses de verano, entre días desestructurados, noches de juegos y charlas y largas jornadas al aire libre, se convierten en un cúmulo de experiencias para regenerarse y volver a empezar con determinación en septiembre.

Niño feliz en verano

Tópicos cubiertos:

Verano con niños: consejos y actividades

1. Ser turista en tu propia ciudad

2. Picnic o camping en casa o en el balcón o en el parque

3. Leer, leer y tal vez incluso escribir

4. Organice una fiesta de pijamas

5. Salga al aire libre tanto como sea posible

6. Actividades y shows en vivo

7. Recorre el bosque y sumérgete en la naturaleza

8. En el mar sí, pero siempre con respeto

9. Jardinería y cuidado de plantas y flores.

10. Juego libre, aburrimiento y creatividad.

Decálogo de Save the Children para el verano infantil en la ciudad.

La situación es diferente para quienes, por el contrario, solo pueden contar con unos días de vacaciones en familia, o incluso tienen que conformarse con estancias en casa, y se ven en la necesidad de inventar una nueva rutina de verano con los niños que, si no están en el campamento de verano, querrán hacer algo hermoso y divertido y no solo el fin de semana.

Y si también puedes sacar algunas ideas de los consejos sobre las vacaciones de Navidad en casa con los niños, teniendo en cuenta que en verano se pasa mucho más al aire libre, aquí tienes algunos consejos sobre qué hacer con los niños en verano obviamente siempre con un ojo en el medio ambiente y la sostenibilidad?

1. Ser turista en tu propia ciudad

¿Conoces esa casa del famoso escritor nacido en tu ciudad y que nunca tuviste tiempo de visitar? O ese museo de ciencias a unas pocas millas de casa. Y luego, de nuevo, edificios, iglesias, tradiciones. Aquí, organiza un bonito recorrido temático con tus hijos, eligiendo las horas más frescas del día y creando un viaje para descubrir tu ciudad. El trekking urbano con niños puede ser realmente una experiencia enriquecedora y divertida. Puedes organizar un mini tour por los edificios sagrados: visitando no solo las iglesias cristianas sino también las mezquitas y templos hindúes presentes en la zona y aprovechando para hablar con los niños sobre las religiones del mundo, o puedes organizar una especie de de recorrido gastronómico por tu ciudad mientras saboreas el típico bocadillo. Sólo existe la vergüenza de elegir.

2. Picnic o camping en casa o en el balcón o en el parque

Aunque no puedas pasar toda la tarde fuera de casa, organizar un picnic para los niños, completo con un juego de cubiertos reutilizables y una botella de agua y en una llave verde siempre es una bonita experiencia. Prepara junto con los niños una merienda -teniendo en cuenta las indicaciones de los pediatras para la nutrición infantil de verano- de frutas y alimentos de verano para llevar en la cesta, extiende el mantel en el suelo y permítete una hora para charlar, comer juntos y quizás leer juntos.

3. Leer, leer y tal vez incluso escribir

El verano es el momento perfecto para ofrecer a los niños nuevas lecturas. Lecturas adecuadas a su edad, historia del lugar que visitará en sus vacaciones, primeras novelas, cuentos que enseñan el amor por el medio ambiente. Y también es un buen momento para estimular a los más pequeños a llevar sus primeros diarios "secretos". Incluso los niños que aún no saben escribir podrán hacer su primer diario dibujando lo que quieran contar y fijando sus recuerdos de verano con dibujos y cómics. Para los mayores, sin embargo, el verano también puede ser un buen momento para intentar inventar el primer cuento fantástico o la primera mininovela.

4. Organice una fiesta de pijamas

Si es posible, los niños mayores ya pueden organizar su primera fiesta de pijamas, y si aún son demasiado pequeños para pasar la noche en casa de un amigo, es posible imaginar una tarde de fiesta completa con camas improvisadas, merienda y juegos de mesa o una bonita búsqueda del tesoro.

5. Salga al aire libre tanto como sea posible

Patines, bicicletas y movilidad sostenible. Aunque haga calor, busca las horas adecuadas para pasear con los niños, ponerte unos patines o subirte al sillín de una bicicleta. Puedes tomar los carriles bici o ir al parque, todo para encontrar siempre un modo de movilidad lento y sostenible. Otra idea es organizar un viaje al mar oa la montaña oa un pueblecito cercano a la casa utilizando más transporte público, desde el tren hasta el autobús o incluso un pequeño barco. Para los niños será una auténtica salida.

6. Actividades y shows en vivo

Descubre las actividades que se organizan en la ciudad. Ir al teatro, al cine, visitar museos y exposiciones temporales con cualquier actividad infantil asociada. En las ciudades o pueblos siempre hay algo que descubrir, solo organízate y quizás contacta con alguna asociación que organice experiencias especiales para disfrutar en familia.

7. Recorre el bosque y sumérgete en la naturaleza

Hay decenas de actividades para organizar en el bosque con los más pequeños: desde senderismo hasta orientación pasando por experiencias mini bushcraft, baños de bosque y observación de aves, insectos y plantas. Adentrarse en el bosque, aunque sea por unas horas, con los niños significa brindarles aire fresco, refrigerio y experiencias que los enriquecen y mantienen su biofilia natural y ecología afectiva. Lo importante es que siempre respeten los lugares a los que van, no molesten a los animales y no maltraten las plantas y los árboles.

8. En el mar sí, pero siempre con respeto

El mar, como sabemos, es el lugar más querido por los niños en verano. Además de los clásicos juegos de agua, natación y todo, aprovecha para apoyar el respeto por la naturaleza incluso en la playa. Recuérdeles a los niños, a través de un buen ejemplo, que los desechos no se dejan y se diferencian y tal vez incluso muéstreles cómo puede ayudar al medio ambiente recolectando plástico de la playa, lo que aumentaría la basura marina. Y obviamente enséñales que es lindo observar cangrejos, cangrejos ermitaños y estrellas de mar pero que nunca se debe maltratar a estas criaturitas y dejarlas en un balde para que sufran el calor.

9. Jardinería y cuidado de plantas y flores

Plantar flores, cuidar la huerta, crear un semillero. Cuidar las plantas y las flores enseña a los niños el arte de la paciencia y la crianza. Crear tu propia huerta perfecta en el balcón, quizás partiendo de simples plantas aromáticas, será también una forma de hacerles apreciar luego el placer de saborear algo que han curado con sus propias manos.

10. Juego libre, aburrimiento y creatividad

Dejar a los niños tiempo libre para inventar, crear y fantasear es uno de los consejos más valiosos que puede haber. Se trata de valorar el aburrimiento, la ociosidad y la lentitud dándoles la posibilidad de optar por no salir de casa y renunciar a alguna actividad planificada porque están atrapados en su juego libre e inventado. Esto no significa abandonarlos frente a las tabletas y los televisores sino darles la oportunidad de pasar un tiempo a solas, sin aportes externos que no provengan exclusivamente de su propio cerebro y de los juegos o material que les rodea.

Muchos niños no pueden pasar las vacaciones fuera de casa, por eso Save the Children creó un conjunto de cosas para hacer con niños durante el verano del año pasado.

- Infórmate de las actividades que están previstas para el verano, gratuitas o a bajo coste (parques, piscinas, museos, colonias de verano...).

- Haga una lista de libros para leer (quizás consiguiendo algunos consejos de los maestros), tómelos de la biblioteca y dedique algún tiempo a leer juntos todos los días.

- Anime a los niños a llevar un diario de verano de actividades y descubrimientos.

- Estar activo con los niños, pasar tiempo al aire libre, caminar o andar en bicicleta juntos (recordar beber), jugar fuera de casa, apagar televisores y computadoras.

- Preste atención a la nutrición, siempre tenga fruta fresca disponible para la merienda, pasen tiempo cocinando juntos.

- El verano es perfecto para la ciencia: experimentar con cubitos de hielo, jugar con imanes, recolectar y recolectar piedras y hojas.

- Jugando con las matemáticas: incluso una visita al supermercado puede convertirse en una oportunidad para poner a prueba las habilidades de cálculo, así como para preparar las dosis de una receta.

- Hacer un proyecto juntos, como volver a pintar un mueble viejo o las paredes del dormitorio, calculando las herramientas, costos y tiempos necesarios.

- Fomentar la creatividad, dando nueva vida a objetos viejos y en desuso, componiendo música y bailando.

- Estar con otros, planificar actividades con las familias de otros niños.