Ramón Villarroel: Cómo se creó el monumento a la Virgen del Acceso a Mendoza
Inventor: el diseño y la creación, en dosis justas con arte, han hecho de la obra de Villarroel un patrimonio tangible. Un video en el que cuenta su historia a Memo.
Su padre tenía un vivero y se las arreglaba, por entonces, para que sus invernaderos, de varillas de hierro y vidrio, funcionaran a la perfección en plena calle Rioja de la Ciudad de Mendoza. Su madre fue artista. Y su abuelo, un ingenioso con la habilidad suficiente para resolver cosas mecánicas y encontrarle la vuelta a las cosas de uso práctico. Por eso, Ramón Villarroel, fue mecánico primero, de oficio, para luego recibirse de enólogo (para nunca ejercer, salvo desde el lado del consumir que sabe qué es lo que toma) y luego, se metió a estudiar Diseño, carrera que no podía sostener económicamente, hasta que lo nombraron jefe de Taller por su idoneidad para el cargo.
Hablamos con un creador, un inventor, un vanguardista: supo aplicar el arte, diseñar soluciones y poner en práctica sueños de modo tal de generar, con ello, bastante más que belleza o curiosidad, sino mover la economía.
Villarroel diseñó elementos para Jeep, creó un sistema impermeable de chapas que, recuerda hoy, "deben tener el 80% de las escuelas de Mendoza" y lo tiene, de hecho, la iglesia de Lourdes en El Challao en su monumental capa roja contra los cerros del piedemonte. También inventó un ajedrez para ser jugado por tres personas, hace unos 50 años, que jugó con varios amigos una y mil veces, hasta que uno de ellos, "no tan amigo, parece" -según recuerda hoy- lo patentó como propio. En definitiva, hoy saca cuentas de que podría haber sido rico, pero no lo es. Aunque tampoco se queja, salvo de que intendente tras intendente le hayan sobado el lomo en Guaymallén, por ser el autor de una pieza a la que vienen ingenieros, diseñadores y admiradores del mundo a observar por su delicado equilibrio, el monumento a la Virgen en el Parque del Acceso Este. En el lugar no hay placa que indique quién fue el autor y fue él. "Había una y se la robaron, por eso me gustaría que haya una piedra tallada con todos los nombres de los que trabajaron en el cálculo de la obra y los que trabajaron", le dice a Memo rodeado de esculturas y obras de arte en la Nave, en donde asiste como "Pancho por su casa" a todas las conferencias de la cumbre Mundaneum.
Ahora Guaymallén le devolverá el autor al monumento, próximamente, junto con un homenaje, pero lo que muchos se preguntan es cómo hizo Villarroel esa obra. Lo hablamos en forma extensa en un video y, además cuenta cómo se le ocurrió la idea, los detalles técnicos y logísticos, impresionantes para un tiempo sin internet ni recursos digitales. Un anticipo antes de que lo veas en el video: el cálculo desde la perspectiva de un galpón se hizo colgando de dos piolas tachos de pintura, para controlar su verticalidad.