Maniobra para gastar más: el gobierno incorporó los DEG del FMI al presupuesto
A través de esta operación, que ya fue realizada por el gobierno de Cristina en 2009, podrán aumentar el gasto público sin incumplir la carta orgánica del Banco Central. Ahora la administración de Fernández comenzará a preparar anuncios que serán financiados con esta maniobra.
El gobierno nacional, a través del DNU 622 publicado en el Boletín Oficial, incorpora al presupuesto de este año los US$ 4.334 millones que recientemente le había transferido el Fondo Monetario Internacional por los Derechos Especiales de Giro (DEG).
La maniobra tiene como objetivo "financiar el Presupuesto General de la Administración Nacional". Lo que harán es aumentar el gasto público, utilizando esa maniobra para no incumplir la carta orgánica del Banco Central.
Ahora el ejecutivo podrá saltarse una restricción respecto a los adelantos que hace la entidad al Tesoro y que indica que no deben exceder la suma del 20% de la recaudación de los últimos 12 meses y el 12% de la Base Monetaria.
El DNU modifica también una serie de planillas de gasto y autoriza a la Administración Financiera del Sector Público Nacional a emitir letras en dólares estadounidenses por el total del monto de los DEG a un plazo de 10 años.
"Pasó lo que se adelantó hace tiempo. Con fuentes de financiamiento monetario al Tesoro al límite de la CO (Carta Orgánica), los DEG se venden por pesos y luego se recuperan con una Letra Intransferible para pagar a FMI. Se usan 2 veces, como en 2009. Esto también vuelve", manifestó el economista Gabriel Caamaño en Twitter.
Ahora, el BCRA le compra los DEG al Tesoro a cambio de emisión de pesos, con esos pesos el Tesoro puede gastar más, eludiendo la restricción de la Carta Orgánica.
De esta forma, el ejecutivo, en medio de la crisis interna y de la presión para que ponga dinero en los bolsillos de la gente, puede aumentar el gasto público con miras a las elecciones de noviembre.
Así se repite una maniobra que usó el primer gobierno de Cristina Kirchner en 2009, cuando también recibió un giro excepcional por parte del FMI.
