Fuerte rechazo desde las economías regionales a la política cambiaria
Coninagro sostuvo que el súper cepo "no genera ingreso de dólares al sistema". Iannizzotto, presidente de la entidad, agregó que se necesita tener reglas claras a favor de la producción y de la exportación.
Coninagro consideró este miércoles que la nueva política cambiaria adoptada por el Banco Central "debilita la confianza". La entidad que preside el dirigente vitivinícola mendocino Carlos Iannizzotto se manifestó "preocupada por la situación de las exportaciones agropecuarias, ya que necesitan un tipo de cambio único, competitivo y no discriminado en contra de la exportación".
En un documento que hicieron público este mediodía, los ruralistas consideraron que "es importante estabilizar la economía y dar señales claras para producir más". Por ello, dieron cuenta que desde su punto de vista, "las nuevas medidas tomadas por el Banco Central en principio no son las mejores, hasta se puede decir son peligrosas porque contribuyen a la gran crisis de confianza que existe".
En forma contundente afirmaron que "no es verdad que no hay dólares: los hay pero fuera del sistema y hay que generar incentivos para que ingresen, mantener el intervencionismo cambiario no generará ingreso de dólares al sistema".
Coninagro sostuvo que "el mayor cepo puede reducir algo la demanda de dólares 'ahorro' oficiales pero no genera ingreso de dólares al sistema". Iannizzotto agregó al respecto que "no está de acuerdo con el atraso cambiario y se necesita tener reglas claras a favor de la producción y de la exportación. Las medidas anunciadas pueden aumentar la brecha cambiaria y esto genera un desaliento, debilita la confianza, con mayor lugar a la especulación y no a la producción".
"En este marco -agregó el documento de la entidad del campo- como quedan pocas reservas hay que hacer que los dólares ocultos circulen. Esto produce lo contrario. Para los exportadores por su parte es un desaliento ya que mantiene el dólar oficial cuando todas las demás cotizaciones se elevarán. Es decir más brecha, más desincentivo para exportar y para liquidar. En el tema financiamiento externo, escaso para Argentina, en momento de liquidez ilimitada, es otra oportunidad que perdemos, para invertir en proyectos que generen empleo, diversificación de la producción de todo el sector cooperativo e integración en cadenas de valor".
Indefinición justo después de la cosecha
Coninagro, agregó que "si bien el camino no se conoce aún, si se observa un estrés cambiario y un ajuste; se busca atrasar lo inevitable restringiendo cantidades (más cepo) cuando hay un problema de precios (atraso)". Y ofreció números. Textualmente, indicó:
- Además de mencionar el tema de la liquidez de esos dólares por parte delos exportadores, algo que comenzó hace varios meses con la campaña 2019/2020 que es laque prácticamente se ha terminado de cosechar en todo el país, tenemos que saber cuál es el camino.
- Si observamos el trigo, de la producción 19/20 algo menos de 20 millones de toneladas, los productores han vendido el 99% (dato al 2 de septiembre de 2020),comparativamente el año pasado a igual fecha era el 88%. En maíz, se ha vendido campaña19/20 62%, más que el año pasado a igual fecha 59%.
- Para la soja, se llevan vendidas 30,8millones de toneladas de unas 49millones estimadas de producción, un 63% igual que el año pasado.
- En los tres principales granos producidos en la Argentina, trigo, maíz y soja, las ventas de la última campaña son mayores a la de la campaña previa, pero tenemos que analizar el costo de realizar la próxima campaña 20/21 de maíz y soja (los dos principales granos que hay que implantar entre este mes y enero 2021); allí suman aproximadamente 6 mil millones de dólares de insumos y labores.
- El momento de uso es creciente desde septiembre a diciembre que hace el pico, esa necesidad de insumos para la próxima campaña en un contexto dónde no hay mucha oferta crediticia se financia en mayor medida con las ventas del saldo disponible de granos de la campaña anterior, lo que da un horizonte para proyectar las necesidades de venta.
Coninagro definió que el que se plantea, "es un escenario no muy claro para el productor, pero por algunas variables como el tipo de cambio, el único cultivo (de los extensivos) que crece en superficie es soja, todos los de más pierden superficie (trigo, cebada, girasol, sorgo y maíz)".
Agregó que "estas razones tienen que ver con una enorme sumatoria de incertidumbres que tiene el sector productivo, que van desde medidas políticas (regulaciones, trabas, impuestos, etc.) costo de implantación, clima, etc. En este contexto los productores han vendido esta campaña más que la anterior a igual fecha, el saldo que resta por vender será moneda de cambio para implantarla próxima campaña".
Expectativas
El documento del campo citó la la expectativa de devaluación medida con Rofex, e indicó que "marca que en junio 2021 el dólar Rofex está en106, contra 76 que está hoy, es decir un 52% en 9 meses. Si bien en un país con una expectativa de inflación del orden del 40 no es un número exagerado, no deja de ser un número importante".
Dio cuenta de esta manera que "mientras no se descomprima esto, actúa como un incentivo a retener. No quiere decir que los productores lo hagan necesariamente, ya que hay otras situaciones en el medio (ciclo productivo, etc.) pero es algo que debería mirarse para evitar incentivos a la demora en la liquidación".