Falta un 50% de cosechadores en Chile: unas 150 mil personas
Un informe acusa al efecto negativo que han generado las ayudas estatales en la evolución del mercado laboral, afirmando que "debiéramos apuntar a que la gente que hoy día tiene la capacidad de trabajar, lo haga.
La baja fuerza laboral que hoy registra el mercado del trabajo en el campo chileno es visto como un obstáculo por aquellas entidades pertenecientes a los sectores productivos más afectados por la crisis sanitaria, como el comercio, el sector gastronómico, la construcción o la agricultura.
Un informe publicado por el diario El Día de Coquimbo, da cuenta que en este último rubro, la vacancia laboral llega a un 50% menos de trabajadores, que a nivel nacional se resume en 150 mil personas menos.
Las cifras, dadas a conocer por la Sociedad Agrícola del Norte, SAN, se originan a raíz de una encuesta realizada en el mes de junio a más de 100 agricultores, cuyo objetivo fue conocer, a nivel macro, el impacto en la Región de Coquimbo sobre la falta de trabajadores en las labores del agro, como las cosechas, siembras o distribución, entre otras tareas.
Y si bien la ausencia de trabajadores en este sector ha permitido la priorización de tareas y el uso de nuevas tecnologías como drones para las fumigaciones, lo cierto es que esta situación preocupa al sector productivo trasandino.
Según María Inés Figari, presidenta de la SAN, el 94,3% de los agricultores manifiesta haber tenido problemas con respecto a la contratación de la mano de obra para labores agrícolas en la temporada 2020-2021.
"Influye en esta situación que las personas en el campo están alejadas de centros hospitalarios y prefieren cuidar su salud, también incide en la falta de apertura en guarderías infantiles, colegios y finalmente por la pandemia del covid-19 que ha incrementado el miedo a salir o realizar tareas con más personas, prefiriendo varios, actividades de teletrabajo. Lamentablemente en la agricultura los trabajos se deben efectuar en forma presencial", señaló la presidenta de la SAN.
Sin embargo, uno de los puntos a destacar es la mejora que se observa a nivel general, de los salarios que se están pagando esta temporada respecto a la temporada anterior.
Por ejemplo, las personas en la cosecha de uva de mesa han llegado a un promedio entre 40 y 60 mil pesos chilenos con un pico histórico de 80 mil por día. En la temporada pasada de cítricos se pagó 50 pesos chilenos por kilo cosechado y hoy se está pagando 100 pesos chilenos por kilo de producto, llegando a un ingreso de 50 mil a 60 mil pesos chilenos diarios por trabajador. En promedio una persona cosecha entre 250 a 400 kilos diarios. Mientras que en labores de poda se pagan 200 a 400 pesos chilenos por árbol.
No obstante, la escasez de personal se mantiene, condición que no tiene visos, al menos en lo inmediato, de cambiar.
Por ejemplo, el presidente de la Multigremial regional, Marcos Carrasco, advirtió que sin lugar a dudas "la falta de mano de obra repercute en esta recuperación económica, la cual estamos tratando de que se produzca".
Apuntó al efecto, negativo a su juicio, que han generado las ayudas estatales en la evolución del mercado laboral, afirmando que "debiéramos apuntar a que la gente que hoy día tiene la capacidad de trabajar, lo haga. Yo creo que hay que frenar un poquito este tema de los bonos y que aquellos trabajadores que están bajo la suspensión laboral se integren al trabajo porque hoy día están las condiciones para eso".
El académico y director de la Escuela de Ciencias Empresariales, Pablo Pinto, advierte que actualmente hay un millón de empleos a nivel nacional, y 55 mil a nivel regional, que se requieren para asegurar el crecimiento económico en los próximos meses.
El problema dice, es que "en la medida en que no estén disponibles, efectivamente eso puede generar un cuello de botella muy fuerte en aquellas actividades que requieren de presencialidad o que requieren de trabajadores calificados y no calificados".
A esto se agrega, afirma, otros problemas que ahondan en el déficit de mano de obra. "La mano de obra mutaba o migraba de una comuna a otra comuna, o de otra región a otra región. Pero con las restricciones a la movilidad que hubo y que todavía algo queda presente de eso, podría afectar ese libre tránsito en movilidad", recalca.