Constructores y Gobierno: lo cortés no quitó lo valiente
Anoche la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza (Cecim) ofreció un duro panorama ante el gobierno en su cena aniversario.
Con el encendido de luces rojas por cierre de empresas y despidos, basado en las condiciones macroeconómicas que empujan al gobierno de Mendoza a no abrir nuevas licitaciones de obras, la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza (Cecim) ofreció un duro panorama en su cena aniversario anual.
La palabra estuvo a cargo del presidente de la entidad, Gerardo Fernández, antes de que se sirviera el plato principal en Finca Don Miguel y ante la presencia del vicegobernador Mario Abed y el ministro de Planificación e Infraestructura, Mario Isgró, entre otros funcionarios e intendentes.
Fernández destacó que el retraso en los pagos genera la pérdida de rentabilidad y que las obras avanzas más por compromiso con su concreción que por sostenerse como actividad comercial, ya que no les resulta conveniente y eso está generando problemas en el sostenimiento en el ecosistema empresario.
La respuesta llegó por parte de Isgró, quien reconoció las condiciones generales y esbozó un plan para el año que viene, sin antes olvidar dejar en claro que "será en un marco de austeridad" y que apelarán al ingenio y al diálogo para sostener la obra pública en beneficio de todos los sectores.
La situación de tensión a la hora de los discursos resultó ineludible, pero no quitó que ambos se agradecieran las sinceridades mutuas. Hay reconocimiento del lado empresario de los esfuerzos y sobre todo, de los cambios impuestos en el área que dirige Isgró desde hace menos de una semana. Y de parte del Gobierno, la distensión llegó con la amplia descripción del estado de situación y del plan hacia adelante que la gestión de Rodolfo Suarez impondrá, previo diálogo en la Legislatura en donde presentará su proyecto de Presupuesto sin que la Nación lo tenga e insistirá con el rollover para refinanciar deudas.