Rod Ramone, un talento mendocino transoceánico: "Nada es fácil, pero no imposible"

Un diseñador se puede transformar en un artista y ese artista, a la vez, puede convertirse en un profesional que sinergiza ambas condiciones. Eso "le pasó" a Rodrigo Sevilla, el mendocino que muchos conocen más como Rod Ramone y algunos identifican con Rock N Board, su iniciativa skater en la que dejó una huella imborrable a lo largo de los años.

Un día se fue.

Llegó a Barcelona con expectativas y talento. Esto último le sirvió de bastón para sostenerse en medio del tremular de la incertidumbre del inmigrante y la distancia de los afectos.

De allí que aquel Rodrigo que conocimos en Mendoza hoy es un Rod muy popular en el mundo del arte y el diseño en Europa, con notable repercusión debido a su ingenio y personalidad.

Volvió a Mendoza y ese tranco transoceánico lo dejó marcado. De aquel retorno, quiso contar "ahora que viajé luego de varios años que no volvía, me llevé buenas y malas sorpresas. Las malas me las reservo, pero sobre las buenas puedo decir me encantó ver y sentir que la gente en Mendoza no deja de meterle trabajo para que sea una ciudad con propuestas culturales", contó. 

Se animó a dar algún tip a los que se quedaron: "Denle, aunque suena mejor 'delen' un fuerte aguante a todo lo que sea autogestivo, o todo aquello que venga a proponer nuevas cosas. Incluso a los medios". Y contó: "Acá está lleno de medios locales de todos los tamaños, y se nota mucho el impacto en la cultura y arte de la ciudad".

Con unas cañas de por medio y alguna tapas para picar antes de la noche, dialogamos en medio de la agitación del final del día en la tapería La Xula, cerca del Barrio de Gràcia.

- ¿En qué te desempeñás en la actualidad y desde hace cuánto tiempo que estás fuera de Mendoza? 

- Actualmente trabajo tanto como Motion Grapher, que es animación y creación de gráficos para publicidad y ficción e ilustrador, donde realizo comics, portadas, diseño de personajes por encargo. Hace casi 5 años que vivo en Barcelona, sin escalas, de Guaymallén a la ciudad condal.

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- Tu trabajo en Barcelona, ¿lo ves como una continuidad lógica de tus propósitos en Mendoza, como algo casual o disruptivo o una buena sorpresa del destino?

- ¡Si a todo!, jaja. Como una hermosa sorpresa, pero con el diario del lunes, puedo leer que es una continuidad lógica de todo lo que venía haciendo en Mendoza. Siempre me gustó dibujar, pero lo abandoné por otras actividades... Rock N Board entre ellas. También por la música principalmente y luego todo un largo proceso de gestión cultural, por llamarlo de alguna manera. La sorpresa vino cuando me di cuenta de que podía aprender, mejorar y trabajar de esto ya de grande, ya que vine a Barcelona a mis 37.

- ¿Te costó insertarte en la actividad artística como práctica profesional?

- Nada es fácil, pero tampoco imposible. Mi último trabajo en Argentina fue en producción de contenidos (RNB TV) primero como coproductor y luego como editor en jefe en el canal público de Mendoza, Acequia. Cuando me vine a vivir a Barcelona, intenté sin suerte dar continuidad a eso, y aproveché para comenzar una nueva etapa... perfeccionando lo poco que sabía de Motion Graphics, y lo poco que sabía de dibujo e ilustración.

Muchas horas de tutoriales y mucha actividad en redes logró que fueran saliendo algunos de los primeros trabajos. Todo este proceso me llevó un año y medio aproximadamente.

- ¿Cuál te parece que es el paso siguiente que tenés que dar? ¿O así estás bien, conforme y realizado?

- ¡Es una buena pregunta!, conforme estoy, pero realizado jamás! jaja. Los pasos siguientes tienen que ver con temas creativos; ahora mismo trabajo para series y películas de Netflix, y también para publicidades de gran rotación, como el Nutmeg Royale de Pepsi Max. Pero mi aporte "creativo" no es tan interesante como me gustaría, soy una pieza más de miles; que no está mal, me gusta trabajar con equipos grandes, pero ya van dando ganas de generar colaboraciones más profundas en estos mismos proyectos. Tuve la suerte de trabajar en el Live Action de Caballeros del Zodiaco haciendo unos concepts para una escena, y eso si que lo disfruté mucho, y es a lo que apunto.

(En imágenes, abajo, algunos de los trabajos de Rod)

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- Cuando volviste a Mendoza te convocaron de la UNCUYO para dar tu visión a los estudiantes. ¿Lo aprendido allí te sirvió en Barcelona o has tenido que adquirir más conocimientos?

- La UNCUYO es algo muy querido para mi. A pesar de que cuando yo estudié no te enseñaban ni a usar el Word, ahí aprendí una infinidad de cosas que me sirven hasta hoy. Hay puntos que han sido fundamentales para instalarme aquí en Barcelona, como la gestión y organización de proyectos, anteponer la creatividad antes que los recursos técnicos, etc. En la UNCUYO tuve materias que nos hacían ampliar el pensamiento durante el proceso creativo, como Sociología, Psicología, Filosofía... y sinceramente, esos puntos son los que considero que me hacen marcar la diferencia hoy por hoy.

Se puede decir que lo aprendido en la UNCUYO acá (Barcelona) fue mi "navaja suiza" de supervivencia. Aquí valoran mucho que sepas gestionar el trabajo, y eso es bueno.

- ¿Estás como para darles consejos a quienes quieran repetir tu camino o creés que cada uno debe hacer su propia experiencia?

- No se si consejos, pero si puedo compartir mi visión sobre esta clase de periplos: creo que es sano cuando uno deja su casa... no subestimar el barrio de origen ni sobrestimar el nuevo. Como dijo Thanos: "Perfectamente equilibrado".

Bonus: mirá una muestra del trabajo de Rod desde sus redes