Diana Arequipa, la última artista de Rampa Visual del año
Memo entrevistó a la última artista de Rampa Visual del año y esto fue lo que compartió con los lectores.
Diana Arequipa es una mujer de gran sensibilidad estética. A través de sus obras podemos descubrirla dedicada, prolija y siempre dispuesta a continuar con su pasión.
¿Cómo y cuándo empezó tu contacto con el dibujo y la pintura?
Mi niñez fue solitaria, casi sin amigos. Jugaba sola en casa y tejía un mundo de ambientes como una perfumería, una verdulería o el aula donde por supuesto yo era la maestra. Me ponía los vestidos de fiesta de mis hermanas, en fin, soñaba y jugaba. Mis grandes compañeros fueron siempre el dibujo y la pintura con lápices, ya que no disponía de otros materiales y eso se extendió hasta más allá de la secundaria. Tanto es así que yo misma creaba los posters para adornaban mi dormitorio.
¿Cuál fue tu formación en las artes plásticas?
Como ya conté en la nota anterior, las Aulas para el Tiempo Libre de la UNCuyo fueron fundamentales en mi formación. Tuve excelentes profesores con quienes aún mantengo contacto y con compañeros de curso también. Allí aprendí técnicas que desconocía y se abrió ante mis ojos un mundo extraordinario que estoy segura, nunca voy a abandonar.
Uno de los más grandes tesoros que me llevé bajo el brazo, fue descubrir el manejo de la acuarela. Sandra Alonso una de las docentes a cargo, fue y es muy importante para mí, no solo por sus enseñanzas sino también por su calidad de ser humano.
"El arte me hace muy feliz, alimenta mi espíritu. Desde pequeña admire a Dalí y las acuarelas de Turner me parecen fabulosas"
¿Qué nos dirías respecto a las diferentes técnicas?
Podría decir que me gustan todas (risas). Con el óleo fui autodidacta y aprendí a manejarlo mucho antes de ir a Aulas. Pinto con variadas técnicas, menos la témpera. Sin embargo la acuarela es la que más me atrae y no pienso dejarla. Me lleva a sentir algo especial cada vez que la utilizo.
¿Qué temas que gustan más?
Me gustan los paisajes con grandes cielos, los abstractos con texturas, aunque la figura humana me atrae mucho. Puedo reflejar sus sentimientos, sus sueños, el amor, las alegrías y las tristezas... Creo que mi paleta es variada. Prefiero los colores alegres para intentar mostrar belleza, alegría y que la gente se sienta bien cuando esté frente a una de mis obras.
"Abriendo alas"
¿Estudiaste los signos del zodíaco durante mucho tiempo para hacer una serie especial?
Sí, fue un trabajo arduo, con ideas, con bocetos, con acuarelas que hice pero en el camino fueron cambiando. Fue una de las tantas ideas que tuve en mi cabeza, que pude llevar a cabo y finalmente exponer en una Galería de Arte en agosto de 2019.
"Escorpio"
¿Cuál ha sido tu experiencia en las muestras en que has participado?
Las muestras colectivas han sido hermosas. Valoro mucho conocer nuevos colegas, la comunicación y el trabajo con ellos ha sido de gran crecimiento para mí.
He participado en Muestras en distintos lugares, en bibliotecas, en salas y galerías de arte como La Barraca. Hago una mención especial del grupo "Maipú Arte" con quien he expuesto en más de 20 ocasiones en Homenaje a los ex-combatientes de Malvinas. Estas muestras fueron llevadas además a distintos departamentos de Mendoza. Estuvieron presentes también en San Juan y en Buenos Aires, siempre bajo la conducción de Carlos Noé, un hombre muy comprometido con el arte y sus hacedores, que ahora nos acompaña desde el cielo.
Por ejemplo en el año 2012 fui convocada por este grupo para intervenir, junto a otros artistas, barricas de roble francés. La mía fue expuesta no solo en el Arena Maipú (la institución que nos convocó) sino que también fue expuesta en un reconocido hotel mendocino y en dos Galerías de arte.
Voy a explicar sucintamente lo que quise plasmar en ella. La concebí como una secuencia que comienza con la Virgen de la Carrodilla. Su manto se transforma en la nieve de las montañas, la nieve en la camisa del cosechador y detrás del cosechador aparece el viñedo que la Virgen protege. En el borde superior se observa el vino derramado hacia la barrica. Está pintada con óleo en sus cuatro caras.
Al año siguiente, en el 2013 fui convocada para hacer una muestra y elegí el tema "La mujer y el cáncer de mama". Para esa ocasión presenté 10 acuarelas, otros cuadros de técnicas mixtas y realicé una especial instalación. Una suerte de móvil con 50 mariposas que fabriqué con mamografías que me acercaron mujeres conocidas y que completé con delicados detalles rosados.
¿Tus proyectos futuros?
Mis proyectos son pintar, pintar, siempre pintar y exponer por supuesto. La pintura me transporta a un estado de paz que no puedo explicar con palabras. Estoy siempre atenta y abierta a las convocatorias que puedan aparecer. Dejo que el universo y Dios se encarguen de eso, yo me dedico mientras a pintar.