Mendoza tuvo una gran y movilizadora Feria del Libro

Mendoza tuvo este año una gran Feria del Libro, dedicada a las "Letras de Cuyo", aunque con relevantes presencias más allá de la región respaldada sobre la cordillera de los Andes.

¿Cómo medir si fue buena o no?

Pronto empezarán a circular los números estimativos sobre la cantidad de visitantes. Pero no será todo.

Hay algo incalculable en cifras que es el humor, el clima que se vivió.

Y más allá de la crisis económica, de los posicionamientos personales tanto en materia política como en asuntos literarios, hubo convivencia, la gente que habitualmente la disfruta lo hizo y, además, los libreros vendieron.

Hubo salas más llenas que otras, autores más convocantes que otros. Pero decenas de autores se llevaron su momento y los lectores vivieron su máxima fiesta.

Felipe Pigna anunció en Mendoza su primera novela histórica

Más gente está leyendo un libro hoy que cuando la Feria empezó, porque fue, lo compró y empezó a echarle tiempo. 

Además, es bueno hacer comparaciones (¿quién dijo que no?): la del año pasado fue defectuosa, poco interesante y muy escasamente convocante, a pesar de que la sede fue entonces en el auditorio Ángel Bustelo, en plena Ciudad de Mendoza y este año volvió al espacio cultural Le Par en Guaymallén.

Algún día se instalará -como muchos desean- en la Plaza Independencia, por donde pasan todos los micros y queda a mano de todas las capas sociales, o en la San Martín y el ECA, en donde alguna vez se hizo con rotundo éxito y salas colmadas.

El sábado: así fue el penúltimo día

La tarde del sábado tuvo su momento para los chicos con varias actividades destinadas para ellos. Ediciones Bambalí, Marie Slosse, Ernesto Guerrero y Fabián Sevilla estuvieron celebrando la reedición de Planta carnívora, Sonrisa del elefante y Juegos macabros. De la misma manera, Juan Pablo Alvelo presentó tres novelas para adolescentes.

Gloria Casañas presentó en Mendoza su nueva novela

Posteriormente, tuvo lugar la presentación, a cargo de Goga, de Marico Carmona, con su última obra Saber si llueve. El actor, escritor y comunicador señaló: "Estoy muy contento, nunca había venido a Mendoza, así que feliz de poder visitar y recorrer un poquito. Me preparo tratando de estar relajado y tranquilo y la mayoría de los poemas que recito me los sé de memoria, entonces es también dejar que pase lo que tenga que pasar y tener la mejor predisposición posible".

Asimismo, Carmona habló sobre sus comienzos y la poesía: "Empecé con una escritura un poco más catártica e íntima, no la pensaba compartir, y a medida que fue pasando el tiempo, me interesé por compartirlo y empecé a jugar, a sacarle un poco de palabras y darle sentido a lo que escribía. Ahí me encontré con la poesía también, yendo a escuchar poesía, gente que recita, leyendo poesía y demás. Eso fue como encontrar un lenguaje, como un acceso al inconsciente de alguna manera, que me fue muy necesario para después conciliarme con algunos sentimientos o algunas emociones. La obra que hoy presento lo publiqué en abril con Alfaguara. Es mi tercer libro de poesía y viene en línea de mi camino de mostrar un poco más de lo que hago. Siempre estoy escribiendo, me gusta darle también un poco de tiempo a la escritura, así que en principio escribo y después veo en qué derivo".

Luego, Lorena Pronsky, presentó su novela Loca, luego de haber editado cinco libros anteriormente, la autora destacó: "Esta novela encontró un lugar en los lectores y profesionales de la salud mental. Entiendo que es un tema que desde la misma literatura no se había tocado mucho y lo cierto es que la gente quiere saber, la gente te pregunta, participa, opina, quiere un poco desterrar esta idea que también aparece un poco en el mismo libro de la industria de la felicidad, de las pseudociencias, del daño que eso está generando también en todos nosotros, en una carrera que a la par que nos proponen la felicidad como meta, muy ligada al éxito, a la abundancia, al dinero, tenemos a la par el aumento de casos clínicos de depresión, de trastornos de ansiedad generalizada, de intentos de suicidio desde muy chicos. Entonces está bueno poder plantearlo arriba de una mesa y ser conscientes de que estamos siendo parte de un sistema de mucha manipulación y que atrás de esos conceptos muy del marketing, digamos, hay toda una ideología, un sistema". Lorena es escritora y licenciada en Psicología, posee una destacada experiencia en el área de la psicología clínica y en el tratamiento de adicciones. Este libro nació de un proceso profundamente doloroso y personal. La autora eligió narrar la experiencia de la protagonista desde una perspectiva íntima y emocional, dejando de lado el enfoque clínico para retratar de manera auténtica la lucha interna y física de la protagonista. Con humor filoso y realista, el texto está repleto de enseñanzas donde la amistad, los lazos familiares, los vínculos sexo afectivos y el erotismo, apoyados en un trabajo introspectivo permanente, cobran especial relevancia.

El inédito caso de la presentación de "un libro que no existe" en Mendoza

Por su parte, Liliana Heker participó con su novela Noticias sobre el iceberg. Este libro es una declaración de amor a la escritura como proceso, en cuanto a las operaciones mentales que se involucran en su armado; lo que permanece oculto, la otra cara del iceberg. Detrás de ese título, que remite a una célebre metáfora de la narración, está Greta, una escritora de 77 años y su imposibilidad de escribir una idea que la obsesiona desde hace 20 años.

"Es una novela que salió en abril, que sin duda expresa una cantidad de cuestiones que a mí me importaban mucho, cierta cuestión respecto de la edad y ciertos desafíos. Bueno, yo vivo con mucha intensidad las ferias del libro. Justamente me importa muchísimo, no solo la Feria del Libro de Buenos Aires, sino que se hagan ferias en todo el país es algo realmente que llena de alegría, sobre todo en momentos en que la cultura está muy amenazada. La gente viene, le importa, revisa libros, le interesa alguno, compra alguno y ese interés por la lectura marca algo bueno. Además, estar acá en Mendoza, provincia que amo y ciudad que amo y que está muy asociada a mi historia, me da mucha alegría", declaró la autora.

Además, Eduardo Guajardo llegó desde Santa Cruz para mantener viva la llama del Nuevo Cancionero. Lo que pasa es que Eduardo es hijo de malargüinos y mantiene ese hilo con nuestra provincia que lo ata a la música y la poesía.

El artista de Río Turbio es un referente de la canción patagónica por su dilatada trayectoria de más de cuarenta años, con cinco discos editados, y por sus letras comprometidas que reflejan el clima y los colores del suelo sureño. Y en esta edición de la Feria del Libro presentó El alfabeto del viento, su obra literaria más reciente, e interpretó canciones de su repertorio.

Iñaki Rojas, ganador en la Categoría Novela del Certamen Vendimia, presentó su libro Siempre mira el lado brillante de la vida. Iñaki, que es escritor, actor, músico, comediante y director teatral, expresó: "Estoy emocionadísimo y sobre todo porque es una historia que tiene tanto que ver con Mendoza, que está prácticamente toda ambientada en una Mendoza medio ficticia, con cambios de los nombres de las calles, de los nombres de los cines. Es una historia muy mendocina, o son historias muy mendocinas, porque es una novela contada en distintos episodios que no se vinculan entre sí, recién únicamente en el final. El título es de una hermosa canción de los Monty Python, de la película La vida de Brian. Así que me parecía oportunísimo homenajearlos".