Errores de cada día

La Prof. Nené Ramallo y un tutorial fundamental sobre términos y tildes mal usados en la escritura. Hay que tener a manos siempre este artículo.

Profesora Consulta por la Universidad Nacional de Cuyo

Nos acostumbramos a escuchar y a leer errores e, incluso, llegamos a incorporarlos en nuestras comunicaciones diarias y, sin querer, ayudamos a su difusión. Daremos algunos ejemplos y recordamos al lector que el uso de la bolaspa () se justifica para indicar que un ejemplo no es correcto. Este signo, la bolaspa, fue autorizado por la Real Academia Española para señalar que los usos consignados no están aceptados en la norma estándar.

EL VERBO PREVER: Este verbo tiene el valor significativo de "ver con anticipación". Si advertimos cómo está formado el vocablo, notamos como base el verbo ‘ver', que todos conjugamos bien el presente del indicativo, sin duplicar jamás la vocal "e. Tengamos en cuenta esta característica cuando le añadimos el prefijo "pre-": "yo preveo, tú/vos PREVÉS, él/ella/usted PREVÉ, nosotros/as PREVEMOs, vosotros/as PREVÉIS, ellos/ellas/ustedes PREVÉN". La única diferencia que notamos entre las formas de "ver" y "prever" es la tildación de ‘prevés', ‘prevé', ‘prevéis' y ‘prevén', resultado de haberse transformado en palabras agudas. Entonces, está mal aquello de "Se preveen lluvias para hoy" que escuchamos y leemos, en forma permanente, en las comunicaciones televisivas, radiales y de las redes. El motivo de la doble "e" proviene de la confusión con el verbo ‘proveer'.

EL HABER IMPERSONAL: Hay una forma de "haber" que la gran mayoría de los hablantes utiliza mal y es su uso como verbo impersonal que indica existencia; esa falla se nota en tiempos distintos al presente de indicativo: en este tiempo, decimos "Hay muchos asistentes" y no se nos ocurre decir " Hayn muchos asistentes"; pero, al cambiar de tiempo, nos encontramos con"Hubieron distintos accidentes". "Habrán incrementos en los servicios". "Han habido quejas al respecto". En todos estos casos, cuando "haber" posee valor existencial, lo correcto es colocarlo en tercera persona del singular, pues no hay sujeto, sino un objeto directo: "Hubo distintos accidentes", "Habrá incrementos en los servicios", "Ha habido quejas al respecto".

‘QUERER' BIEN CONJUGADO: Es frecuente oír comunicaciones como Cuando nosotros querramos, pueden ustedes traer el pedido". Esta forma del verbo "querer" no existe en la conjugación: se debe decir "queramos" y pertenece al presente del subjuntivo; no debe confundirse con el futuro del indicativo "querremos" o con el condicional simple "querríamos". Así, la oración dada debió ser "Cuando nosotros queramos, pueden ustedes traer el pedido".

LAS TILDES QUE SE FUERON PARA NO REGRESAR: Cuando estaba en mi escuela primaria, recuerdo que una maestra escribió y recuadró durante cada día de un largo año escolar, la siguiente leyenda: "Fue, fui, vio, dio NO SE TILDAN". Pues bien, esa regla se amplió pues abarcó desde 2010 una lista de formas verbales monosilábicas que dejaron atrás la tilde; así, hoy, escribo "El hombre se rio durante largo rato". "Esa familia se crio en el campo". "El mendigo lio sus pertenencias y se alejó". "Vosotros veis un hermoso paisaje". Los cuatro verbos son monosílabos y no se tildan; los tres primeros, en perfecto simple, contrastan con las formas en presente, que son bisílabas, y llevan tilde por presentar hiato: "Me río con ganas". "Ahora yo crío peces de colores". "Me despido, lío mis pocas cosas y me voy".

NO ES LO MISMO ‘POR QUÉ' QUE ‘PORQUE y ‘POR QUE': Hay muchas personas que confunden la expresión destinada a preguntar por una causa con la palabra que se usa para expresar esa causa. En efecto, si deseo indagar por un motivo o razón, utilizo en preguntas directas o indirectas la locución causal formada por la preposición 'por' y el interrogativo 'qué': "¿Por qué te fuiste tan temprano?"; "Dígame por qué faltó ayer.

Cuando vamos a brindar la respuesta, usamos la conjunción causal 'porque', en una sola palabra y sin tilde: "No puedo concurrir porque estoy enferma".

Pero, además, existe el sustantivo 'porqué', de género masculino, tildado como palabra aguda. Siempre lleva antepuesto el artículo 'el' y, además, puede pluralizarse: 'los porqués': "No me queda claro el porqué de tu renuncia". "EL funcionario debió responder los porqués de tantas irregularidades". Se puede sustituir por el sinónimo 'motivo'.

Además, tenemos la posibilidad de encontrarnos con la combinación de la preposición 'por' y el relativo 'que'; entre ellos, puede intercalarse un artículo que corresponde al género de un sustantivo replicado en el relativo: "El camino por (el) que voy marchando es muy inseguro". "La causa por (la) que lucho ahora es noble". "Los momentos por (los) que debí pasar serán inolvidables". "Las palabras por (las) que será juzgado fueron muy ofensivas".

Finalmente, existe otra forma de usar la combinación ‘por que': el verbo puede exigir la preposición ‘por' y, a continuación, se inserta una cláusula encabezada por ‘que': "Los profesores votaron por que no se continúe con esas medidas de huelga".

LOS DEMOSTRATIVOS Y EL AGUA: Cuando a uno de nuestros hijos o nietos les preguntan de qué género gramatical es 'agua', no debemos vacilar: es femenino, pero decimos 'el agua' porque comienza con 'a' tónica y, por razones de eufonía, se le antepone el artículo masculino: 'el agua'. Lo mismo sucede con 'área', 'alma', 'arpa', 'arca', 'ave', 'ala', 'aula', por nombrar algunos casos; también, con 'hada', 'hacha', 'haba'. Pero, en plural, todos ellos llevan artículo femenino: 'las áreas', ''las almas', 'las arpas', 'las arcas', 'las aves', 'las alas', 'las aulas', 'las hadas', 'las hachas', 'las habas'.

Hay un error en que incurren muchos hablantes y es el que atañe al género de los demostrativos en relación con los casos mencionados: si les anteponemos un demostrativo, deberá ponerse en femenino: 'esta agua', 'aquella área', 'esa aula', 'esta hacha'.

Son excepciones a la regla general los nombres de las letras "alfa" y "hache", que llevan artículo femenino: 'la alfa' y 'la hache'.

EL DÍGRAFO OLVIDADO: Todos aprendimos que el español posee dos consonantes vibrantes: la simple, que transcribimos "r", como en "cara", "pera" y "loro"; además, la múltiple o dígrafo "rr", siempre en interior de palabra, como en "parra", "corre" y "berro". Pero, por una cuestión convencional, la múltiple se transcribe "r" al principio de palabra: "rabia", "rubro" y "rector". Hay que recordar que, cuando a una de estas palabras se les antepone un prefijo, es necesario recuperar el dígrafo: "antirrábica", "polirrubro" y "vicerrector". De lo contrario, estamos cometiendo error ortográfico. También es incorrecta la grafía en dos vocablos, separados por guion dado que los prefijos se sueldan a la base.

LOS SIGNOS DE PREGUNTA Y DE EXCLAMACIÓN SON DOBLES: En español, tanto los signos de pregunta como los de exclamación son dobles, esto es, obligatoriamente van al comienzo y al fin de un enunciado interrogativo o exclamativo: "¿Cuánto vale este cuaderno?" "¡Tremendo calor el de este verano!"; además, si con la pregunta o la exclamación se da por concluida la oración, detrás del signo de cierre no se coloca punto