Parte de situación al domingo de los verduleros de Villa Nueva oriundos de Bolivia
Más miedo que peligro real. La situación planteada en una verdulería de Bandera de los Andes y Avellaneda, en Guaymallén, no aparenta ser un caso sospechoso, aunque les dieron cuarentena. Sí surgió el dato de un quiosquero vecino, enviado a confinamiento domiciliario.
Nada indica que tengan coronavirus covid-19 los verduleros de Villa Nueva que ayer se volvieron virales porque fueron denunciados por arribar desde su país de origen, Bolivia, y estaban atendiendo su negocio.
Les ordenaron aislamiento pero no poseen síntomas compatibles con la enfermedad de la cual se vive una pandemia.
La situación se reprodujo notoriamente porque se los acusaba de violar la cuarentena. Como la policía los acompañó hasta su casa, en donde había otra verdulería, los vecinos creyeron que había algún peligro y volvieron a denunciarlos, por lo que se armó una batahola. Sin embargo, oficialmente se conoció que Bolivia no es un país peligroso ni en emergencia, por lo que solamente se trató de una sospecha infundada, basada en el temor.
Los verduleros no hacían más que ofrecer un servicio como cualquier otro negocio de cercanía, en este caso, en la esquina de Bandera de los Andes y Avellaneda.
Sin embargo sí se están realizando acciones contra un vecino que atendía en un minimarket de las inmediaciones que había pasado por Panamá y Uruguay, y sí se verificó que había violado la cuarentena obligatoria, ya que hacía tres días que había llegado, aunque no tiene ningún síntoma hasta el momento.
