El oro crece como refugio y se consolida arriba de los u$s 3.000
El metal se había acercado a los u$s 3.200, pero hacia el final del jueves cedió 1,18% y cerró a u$s3.128,30 por onza. En total, ha avanzado más de u$s500 en lo que va del año.
El oro finalmente bajó 1,18% este jueves y la onza terminó en u$s3.128,30, con los mercados signados por la especulación en torno de los anuncios arancelarios de Donald Trump. Los analistas técnicos ya venían monitoreando de cerca los niveles de resistencia y soporte para determinar la dirección futura del precio, habida cuenta de que lleva ganado en el año más de u$s500 en 2025, lo que representa una rentabilidad de más del 20 %.
El 31 de marzo había alcanzado un nuevo máximo histórico de u$s3.149 por onza, lo que pone de manifiesto la fuerte demanda del activo en medio de la incertidumbre económica. Más allá de esta última baja, el precio del metal se consolida por encima de los 3.000 dólares por onza.
Qué pasa si Trump cede
Las especulaciones de una posible descompresión giran en torno de que Trump invitó a negociar y el secretario del Tesoro reconoció que los aranceles anunciados representan el límite superior del rango previsto. En tanto, los análisis más pesimistas descreen de una marcha atrás completa e inclusive temen que estas tarifas permanezcan vigentes por más de tres a seis meses o incluso aumenten si se produce una escalada de represalias por parte de los socios comerciales.
El riesgo es que la economía estadounidense sea llevada a una recesión y forzar a la Reserva Federal a aplicar recortes adicionales en su tasa de referencia. La inmediata reacción del mercado sugiere que los temores de una guerra comercial podrían mantener el interés en los activos de refugio, como el oro. Si las medidas de Trump resultan ser menos agresivas de lo previsto, algunas posiciones de oro podrían deshacerse, dependiendo del apoyo del mercado físico. En este contexto, los inversores estarán muy atentos a los detalles de los anuncios de tarifas.
Cómo impacta en los mercados
No por inesperada, la declaración formal de guerra comercial no dejó de pegar duro en Wall Street. Mantuvo las pérdidas a media sesión y el índice tecnológico Nasdaq descendió un -4,5 %. Los activos argentinos, por ejemplo, se hundieron hasta un 11% en este jueves negro. Las materias primas y metales acusaron el impacto de la señal recesiva, por lo que registraron en general fuertes retrocesos. Ni el oro no se salvó.
Otros mercados de activos también considerados refugio, como la deuda de EEUU, se desplomó a 4,062, su nivel más bajo desde octubre y el dólar perdía valor frente al euro, con un tipo del 1,1037. El petróleo de Texas caía un 7 %, hasta 66,74 dólares, presionado por la decisión de la alianza OPEP+, liderada por Arabia Saudí y Rusia, de subir su producción de crudo a partir de mayo. Históricamente, el oro es visto como una cobertura contra la inflación y la inestabilidad económica.