Internacionalización universitaria en casa: estrategia permanente de inclusión con enriquecimiento cognitivo
Celia Chaab y Carlos Abihaggle analizan el panorama de la necesaria internacionalización universitaria en un contexto de pandemia y cuarentena.
Aproximadamente 5,7 millones de estudiantes universitarios en el mundo se movilizan por año para estudiar en una universidad extranjera, en su mayoría, a través de los programas de intercambio académico estudiantil. Estas estancias de estudio en el extranjero (conocidas también como movilidad estudiantil) surgen por convenios bilaterales entre universidades, por movilización de redes interuniversitarias, por actividad del programa Erasmus Mundus, entre otros.
La internacionalización de los estudios superiores respecto de la movilidad clásica requiere, necesariamente, del desplazamiento geográfico por el mundo. En este sentido, la pandemia actual jaquea el proceso, lo interpela, lo cuestiona. Encuestas realizadas tanto en Europa como en Estados Unidos están demostrando que una proporción importante de estudiantes están desistiendo de tales alternativas y, en otros casos, dudan de que esas posibilidades se mantengan abiertas, sean factibles.
¿Que hacer en contextos adversos con la internacionalización?
En 1999 Bengt Nilsson dio la respuesta al elaborar el concepto de internacionalización en casa (IaH). Dicha idea radica en que la internacionalización de los estudios superiores puede también lograrse sin el tradicional traslado territorial; sino que puede concebirse como un proceso mediante el que los estudiantes adquieren competencias internacionales e interculturales sin dejar su propia ciudad.
En su oportunidad, Nilsson se vio impulsado a elaborar estrategias de internacionalización porque en su Universidad de Malmo, Suecia, imperaban estudiantes de grupos étnicos y culturas diferentes para los cuales los procesos de inserción y armonización a la vida estudiantil se veían desafiados. Luego, en 2008 Frank Knight amplía el concepto hacia el conjunto de actividades relacionadas con la internacionalización del currículo y los trayectos formativos. Finalmente, Jos Beelen y Elpesth Jones la definen como la "integración deliberada de las dimensiones internacionales e interculturales en el curriculum formal e informal de TODOS los estudiantes dentro de la esfera de aprendizajes domésticos".
En este sentido, la internacionalización en casa implicaría programas de estudios que en forma deliberada tienen un enfoque internacional e intercultural para todos los estudiantes, con perspectivas cosmopolitas, estudios comparados sincrónicos y diacrónicos. Esta extensión del concepto transformaría a las universidades en verdaderas comunidades de aprendizaje internacional, porque abarcarían no solo el ámbito universitario sino todo el entorno del mismo: familias de los estudiantes, sus comunidades, procedencias, formas de gobernanza en otros países, usos y costumbres, etc.
¿Hay antecedentes de internacionalización en casa?
En marzo de 2013, la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO), a instancia y propuesta nuestra desde la entonces Secretaría de Relaciones Internacionales e Integración Regional Universitaria, sancionó la Ordenanza 20/2013 en la que se aprobó la internacionalización en casa para su comunidad universitaria. Fue un proyecto señero en el ámbito de las universidades argentinas, fue expuesto en la red Interuniversitaria nacional: Red Ciun y en universidades del extranjero. En la ordenanza se pautaron cuatro programas de internacionalización sin desplazamiento geográfico que fueron implementados durante los años 2013 y 2014, todas bajo el formato de fondos concursables, según convocatorias ad-hoc:
Convocatorias docentes para internacionalización de curriculum: dictado de cátedras de distintas facultades en lengua extranjera, dobles titulaciones, entre otras posibilidades.Convocatorias para investigadores y docentes-investigadores para trabajos en colaboración con universidades extranjeras.Convocatorias para docentes, investigadores y estudiantes para la creación de centros internacionales virtuales.Cursos de verano sobre temáticas de internacionalización, en conjunto con universidades extranjeras a través de video-conferencias.Convocatoria estudiantil y para personal de apoyo académico para becas de idiomas.La UNCuyo asumió la tarea de forma mancomunada con las Secretaría de Asuntos Académicos e Investigación, Ciencia y Posgrado y durante dos años abundaron los ejemplos y casos concretos sin visas, ni compra de pasajes; solo con más gestión de redes para el logro de convenios y acuerdo de programas específicos.
IaH: oportunidad estratégica de pandemia
En años como el que vivimos, con situación contextual de excepción por pandemia y con prevalencia del COIL (aprendizaje colaborativo en línea), el antecedente mendocino contribuye para revalorizar las estrategias de internación en casa como manera de prevalencia de la interculturalidad sobre las situaciones económicas, sanitarias, políticas coyunturales.
En el centro de su cosmovisión está el espíritu de inclusión porque al disminuir costos en todos los sentidos: familiares, vinculares, económicos y al ser asequible a una comunidad de aprendizaje completa (no solo docentes, investigadores y estudiantes, sino también personal de apoyo académico); sus beneficios se amplían y redundan en enriquecimiento cognitivo y socio-cultural para todos los participantes. Mientras que la movilidad académica alcanza a solo un 5% de la población de una universidad, la IaH puede aumentar significativamente este porcentaje.
La invitación
Aprovechemos los cambios de rutina a los que nos ha sometido la pandemia 2020 para incorporar definitivamente la internacionalización en casa, al conjunto de los estudiantes, docentes y personal de apoyo académico, para que puedan beneficiarse con las estrategias de la internacionalización y de la interculturalidad. Ya que cada experiencia de internacionalización redunda en el desarrollo de habilidades blandas como trabajo en equipo, respeto por la diversidad, desarrollo idiomático, convivencia intercultural, curiosidad, tolerancia y compromiso.
Celia Chaab Carlos E. Abihaggle