La rosca en el cuarto oscuro de Luján previo al histórico triunfo de Bragagnolo

Si bien había perdido las PASO del 9 de junio, el peronismo de Luján, con Omar Parisi a la cabeza, se había entusiasmado con un posible triunfo sobre Sebastián Bragagnolo, el candidato de Cambia Mendoza. El factor que daba esperanzas era la ausencia en la boleta de Omar De Marchi, quien sí había estado en la lista en las primarias, comicios en los que perdió la interna a la gobernación.

Esta situación no sólo envalentonó al frente peronista Elegí, sino que incluso llegó a preocupar a algunos laderos de Bragagnolo que le recomendaron al candidato que en la boleta figurara también su segundo apellido: De Marchi (el intendente electo de Luján es sobrino del actual jefe comunal).

La propuesta se pensó, más que nada en el entorno del diputado nacional, que rápidamente desestimó esa opción con la confianza de que el factor "De Marchi en el cuarto oscuro" no sería trascendente en el resultado final de la elección, ya que comprendió que su vínculo con la gestión que gobierna Luján estaba más que comprobado.

Los resultados del domingo 29 de septiembre terminaron de darle la razón a Bragagnolo, quien sumó 58% de los votos (cifra histórica en Luján desde el retorno de la democracia), aventajó por unos 30 puntos a Parisi y la categoría intendente sumó más votos que Rodolfo Suarez, legisladores y concejales. Es decir, sus votos no se explican por un posible "arrastre".

En cuanto a la estrategia del peronismo de Luján en el cuarto oscuro, a muchos les llamó la atención que el nombre de pila de Parisi apareciera mucho más grande que el apellido. ¿Acaso quisieron confundir al electorado remarcando el nombre que comparte el peronista con el actual intendente? Desde el frente Elegí respondieron que todos los candidatos a intendente tenían el nombre de pila más grande en la boleta.