Dos Milei inician el año de la presidencia libertaria
Cada vez aparecen más claros dos Milei, el de la campaña permanente para fanáticos, y el más "institucional", dirigido a captar inversores y -sobre todo- el electorado molesto por sus discursos rudos. Viaje a Italia con agenda oficial y libertaria. Un tiro para el lado de la clase media: denuncia a prepagas por cartelización. Escribe Silvia Mercado.
"Javier Milei es el mismo desde el día en que nació", dijo el vocero presidencial ante una pregunta de esta cronista acerca de si hay "dos Milei, uno más institucional que puede verse en los dos últimos mensajes presidenciales".
Manuel Adorni puso su propio conocimiento del Presidente como prueba de lo que decía, que por cierto no datan del día de nacimiento, "al menos desde que yo lo conocí, de lo que yo puedo dar fe".
Como sabe, ningún desvío es aceptable en lo que hace a la imagen presidencial, ni cualquier falsificación, lo que sería letal para el posicionamiento diseñado por el estratega de la comunicación libertaria. El líder es siempre genuino, siempre tiene razón, siempre es el más inteligente de todos y, por supuesto, siempre dice la verdad.
Pero Adorni quiso explayarse. "Si notaste algún cambio, cuando uno está en un ambiente más relajado uno tiene una libertad mayor de exponerse y mostrarse. En cuanto a la cadena nacional, estamos muy acostumbrados a que sea una herramienta de un partido político, acá con este gobierno se usará siempre con un objetivo de tipo institucional, no partidario. Esperamos que los gobiernos que lleguen después que nosotros actúen del mismo modo".
Y para que no quepan dudas de que sigue el manual del buen libertario, el Vocero sentenció: "La cadena nacional fue impecable, tanto en contenido como en forma".
En rigor, son varios los funcionarios que vienen hablando con él sobre la necesidad de "institucionalizar" los discursos oficiales. Es un reclamo que le llega al Presidente desde las oficinas de quienes mantienen trato directo con los empresarios que podrían invertir en la Argentina, y siguen temiendo por la calidad de la democracia. No tanto por el corto plazo, sino por el largo, cuando sus inversiones ya estén enterradas en territorio nacional y paguen altísimos costos si tienen que dejar el país, como fue -por ejemplo- en el caso de Venezuela.
Tanto es así, que Milei en la semana que pasó puso destacó en X que puso el video más militante en su cuenta personal y el oficial en Oficina Presidencial Argentina para que no se quejen porque "ña, ña, ña, ña, ña es la cuenta de un Presidente".
Increíble, pero real, Milei está distinguiendo los momentos fanáticos de los institucionales. Y lo está haciendo público.
En bambalinas, ya nadie duda de que hay una franja muy importante del electorado que votó por LLA en el balotaje que ya está cansado con sus modos violentos y rudos. "El problema es que no hay ninguna posibilidad de segmentar tanto cuando se trata de una figura presidencial, es inevitable que se crucen ambos estilos", explicó a Memo un experto.
Otros datos llaman la atención. A las 12 partió hacia Roma en una visita oficial a la que fue invitado por Giorgia Meloni, con quien concretará su sexta entrevista. Solo lo hará acompañado por la secretaria general, Karina Milei. A pesar de que mantendrá reuniones con la CEO de la empresa multinacional Río Tonto Group y con el titular de la automotriz Stellantis, no será acompañado por el ministro de Economía, Luis Caputo, ni por el canciller, Gerardo Werthein, ni siquiera por el jefe de los asesores presidenciales, Demian Reidel.
No se recuerda que haya enfrentado encuentros con empresarios así, a poncho, acompañado apenas por su hermana. Salvo cuando se trata de amigos, lo que no es el caso.
Claro que el motivo principal del viaje está centrado en su participación en el festival de jóvenes de derecha italianos que se desarrollará en el Circus Maximus de Roma, donde será invitado especial. Segundo tema en importancia, recibir el Premio Internacional "Milton Friedman" en el Palacio Wedekind, una distinción "en honor al notable economista que reconoce a quienes, desde la teoría económica, promueven la libertad", según explica la gacetilla oficial.
Con Meloni se verá mañana viernes a las 14.30 hora argentina y, al día siguiente, además de participar en el festival de los jóvenes conservadores, dará una entrevista al programa televisivo Quarta Republica (cuyo periodista Nicola Porro ya lo entrevistó en febrero de este año), miembro de un grupo de medios fundado por Silvio Berlusconi quien también se batió en una batalla cultural contra los medios de su país, que calificaba de "rojos".
Así es que inicia Milei su segundo año en el poder. Con los medios internacionales fascinados con su figura, los inversores que empiezan a creer que -finalmente- Argentina inicie un camino que no ponga en peligro la actividad privada, la inflación en baja y el consumo también, los apostadores financieros exhultantes y los jubilados en niveles de indigencia. Y la clase media con dificultades cada día mayores para pagar sus gastos habituales.
Pero un tiro sonó para el lado de la clase media, tan castigada durante el año. Hoy la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia de la Secretaría de Industria y Comercio resolvió imputar a siete empresas de medicina prepaga, a la asociación que las agrupa y a quien ejerció como su presidente, Claudio Belocopitt, por presunta cartelización.
Se trata de las empresas Galeno Argentina SA, Hospital Británico de Buenos Aires, Hospital Alemán Asociación Civil, Medifé Asociación Civil, Swiss Medical SA, Omint SA de Servicios y OSDE Organización de Servicios Directos Empresarios y la asociación Unión Argentina de Salud, además del ya mencionado Belocopitt.
Esta es la lista de las prepagas imputadas por cartelización
La CNDC considera que los "cárteles de núcleo duro como prácticas absolutamente restrictivas de la competencia, los cuales consisten en el acuerdo entre dos o más competidores para fijar precios, restringir la oferta, repartirse el mercado o coordinar posturas en licitaciones, concursos o subastas".
Las empresas denunciadas tienen 20 días hábiles para presentar las pruebas que desvirtúen la imputación.