La Picada

Viajes que sirven, viajes que no; De Marchi en la mira y Rody, "el pez que por la boca crece"

Tres perlitas políticas de la semana seleccionadas, con protagonistas mendocinos.

Equipo Memo

Cuando los viajes de gestión sí sirven

La semana política en Mendoza ha tenido condimentos interesantes, pero no deja de llamar la atención la escasa profundidad con la que transcurre. Es cierto, aquí es "donde topa lo pandito". Un tuiteo aquí, una chicana allá, otro político más que se pone un programa de streaming para ver si conquista corazones de gente aburrida pegada al celular...

Entre las perlitas que han ido surgiendo sobresalen algunas cosas que terminaron siendo más importantes que lo esperado. Por ejemplo, el viaje del intendente Marcos Calvente a España, para un congreso de innovación en donde fue a mostrar y también a aprender sobre cómo llevar los servicios municipales a la gente desde el celular, cosa en la que están metidos de cabeza varias comunas.

El asunto es que Calvente también tenía en su haber la construcción junto al exintendente Marcelino Iglesias de un entramado de drenajes y desagües que permitieron que muchas zonas bajas de su comuna no se inundaran más, como sucedía habitualmente, sobre todo en El Bermejo, El Sauce, algunas zonas de Villa Nueva y en la ruralidad que, como muchos dirigentes y opinólogos no recorren, desconocen.

Enterados de ello en una España golpeada por las DANA, con efectos de tragedia centralmente en Valencia, le cambiaron la agenda, porque lo invitaron a hablar de eso. Y no obstante, luego se le arrimaron alcaldes a pedirle más data, lo cual resultó en un networking positivo e inesperado.

Por supuesto que se trabajó en paralelo con la innovación y surgió una nueva oportunidad en Roma, en donde el embajador argentino en Italia, Marcelo Giusto, le dio la derecha para avanzar con la promoción de "Guaymallén, capital del espumante" en tierras del prosecco. 

El entusiasmo con el interés de Giusto radica, según contó el propio Calvente, en sus antecedentes y capacidades personales, que le pueden servir no solo a Guaymallén, sino a Mendoza: Giusto ha ocupado roles clave como cónsul general en Miami y Nueva York, y más recientemente en Estambul, donde su labor en la promoción cultural y económica ha sido ampliamente reconocida. Su desempeño en Italia le valió el Premio Gazzetta Diplomática, que lo distinguió como el mejor embajador acreditado en ese país en 2024.

En la mira

También surgió un hecho extraño: el gobierno de Javier Milei sacó de la jurisdicción de la Casa Rosada al mendocino Omar de Marchi, que se había aquerenciado en un cargo poco justificado de secretario de Estado para las relaciones con el Congreso y lo mandó como segundo en Aerolíneas Argentinas, empresa que tuvo en la semana su momento más ríspido.

En la solución de los problemas generados por los gremios aeronáuticos se vio a mucha gente, pero no a De Marchi: Patricia Bullrich mandó a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) a bajar las valijas de los aviones, en medio de miles de pasajeros tomados como rehenes de la política partidaria de los que perdieron las últimas elecciones y se acantonan en los gremios para resistir.

Claro, es que no estaba para encabezar ninguna tarea: se conoció (leer aquí) que se había tomado un avión de la empresa de la que es vicepresidente para venirse a Mendoza, en donde permanecerá entre el jueves pasado y el martes próximo. Es decir: cuatro días hábiles fuera de Buenos Aires, en donde está el problema con los sindicatos aeronáuticos y en donde se cocina la privatización (o lo que vayan a hacer) con Aerolíneas. 

El tuit que lo reveló todo:

Lo que hizo fue aplicar una actitud propia de un legislador nacional, que básicamente hacen eso, porque tienen que estar allá y acá. ¿Pero a De Marchi? ¿Quién lo necesita en Mendoza si le pagan para estar atendiendo uno de os asuntos más graves de la gestión en Buenos Aires?

Son varios los que lo tienen en la mira y auguran que Javier Milei, que está sacándose de encima a funcionarios derrochones o vagos, vea esto que está pasando.

Después de lo difundido, De Marchi intentó desmentirlo, pero lo único que hizo fue confirmarlo todo, salvo que había viajado en categoría business. Memo, de buena fe, publicó la "desmentida", pero era mentira: sí utilizó el privilegio de pagar baratísimos los pasajes. Que haya viajado cómodo o incómodo, importa -apara el caso- dos pepinos:

A todo esto, empiezan a circular rumores no confirmados de políticos que ya en la anterior privatización de la misma empresa recibieron pasajes de favor de Marsans, su comprador y otros. Hay una lista, pero como no está confirmada, no se puede difundir, sería un error malicioso.

El pez por la boca crece

En tanto, hablando de políticos que cometen errores, en el radicalismo capitalino comentan que luego de que el exintendente que quiere volver a serlo y exgobernador, actual senador nacional Rodolfo Suarez diera unas sorprendentes declaraciones al programa de streaming Bardo, se tuvo miedo por su estabilidad política pero que, medido en una encuesta "creció dos puntos".

Cabe recordar que a Suarez se lo vio descolocado, más activo que de costumbre, en "modo Milei", despotricando contra los periodistas, a los que llamó "empleados públicos", dejando en ridículo a funcionarios suyos que lo son de Cornejo y además, contando cosas que supuestamente le hicieron contratistas del Estado como Orly Terranova que ni denunció en su momento ni ventiló convenientemente.

Por supuesto, un streaming que ven 150 personas se multiplicaron escasos 30 segundos editados y difundidos por las redes.

Suarez se había arrepentido de lo que dijo y lo comentó con muchas personas, acongojado. Pero cambió de opinión al ver las encuestas. El asunto es que, de acuerdo a los que giran alrededor de los Suarez ("Los Keneddy cuyanos") "decir verdades guardades trae beneficio" y podría ser la nueva forma de encarar la difusión pública en adelante.

¿Qué otras cosas han callado y debemos enterarnos de las operaciones de "empresarios" al salto por más recursos del Estado?

Clic para repasar.

Falta mucho para 2027, pero hay que ver si con eso y el recuerdo de su paso fulgurante de obra pública en su anterior intendencia, le alcanzan para reincidir en 9 de Julio al 500. O si le tocará alguna vez a Mariana Juri, senadora junto a él y, además, integrante del mismo espacio interno del radicalismo capitalino.

Esta nota habla de: