La resistencia de la UNCUYO que no quiere arancelar y, a la vez, busca conseguir recursos

Las universidades nacionales atraviesan un momento complicado en cuanto a lo presupuestario y sus dirigentes buscan maneras de poder mantener activas las actividades institucionales. La rectora de la UNCUYO, Esther Sánchez, habló con Gabriel Conte, Evangelina Argüello y Hernán Bitar en "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, y explicó la situación.

"Estamos buscando diferentes herramientas que nos permitan seguir funcionando y cumpliendo la misión fundamental que tenemos que es la de formar a nuestros estudiantes y contenerlos", explicó la rectora, a lo que agregó: "Ayer se aprobó el presupuesto 2024 que no es otra cosa que el mismo que para el 2023, pero allí proponemos generar un fondo que nos permita mantener los servicios básicos que implica tener la estructura de la universidad en condiciones".

Además, Sánchez también resaltó que se conformó otro fondo pensado para reforzar las becas que seguramente se irá reforzando: "Para el mes de enero, que es lo que hemos recibido, tenemos los mismos fondos para funcionar que en enero de 2023, cuando ha habido una inflación interanual de más de 250%. Eso implicaría que necesitamos 3 veces más de lo que tenemos para funcionar".  

La rectora de la UNCUYO se mostró en contra de los modelos de arancelamiento

Frente a esto, la rectora de la UNCUYO explicó que se siente muy apoyada por el Consejo Superior y que, debido a la gestión ordenada en el 2023, se pudo armar un fondo con el que estaba pensado hacer refacciones o pequeñas obras y se está utilizando esos fondos actualmente: "La Universidad existe porque existen los estudiantes, es la razón de ser. Allí estamos poniendo nuestros recursos". Además, agregó que aún no se tienen cifras certeras acerca de la adhesión al paro propuesto para el día de hoy.

Sánchez explicó que el aumento de 70% propuesto por el Ministerio de Capital Humano está pensado para los gastos de funcionamiento: "El presupuesto universitario se divide en dos: una parte tiene que ver con las remuneraciones, el pago al personal docente y no docente y eso significa el 90% del presupuesto y se va ajustando con la pauta salarial que se acuerda en paritarias; por otra parte, el 10% restante se destina a atender gastos de funcionamiento, no solo los servicios sino por ejemplo los reactivos de los laboratorios y todo lo que se necesita para que se puedan desarrollar las clases. Ese es el porcentaje que proponen incrementar, todavía no tenemos comunicación oficial".

La rectora de la UNCUYO rechazó la idea del arancelamiento y sentó su postura: "Me defino como reformista y defiendo la educación pública y no arancelada. No es una educación gratuita porque alguien la paga, la sociedad. Es la herramienta más potente que tenemos para lograr un crecimiento y un desarrollo como sociedad. Lograr que de alguna manera el pueblo tenga conciencia de la democracia y sepa tomar decisiones con una formación concreta", marcó. 

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Sánchez señaló que hay diferentes formas de ir generando recursos y que la universidad no solo forma a estudiantes: "Hacemos extensión, tenemos organismos artísticos, hacemos vinculación con el medio socioproductivo. Los aportes que hace la universidad desde su creación al sector privado y al público son importantes. Está bueno que la sociedad lo conozca".

La rectora concluyó marcando la importancia de la educación y cómo ésta debería ser incorporada al decálogo del Pacto de Mayo propuesto por el gobierno nacional: "Para nosotros es una herramienta de transformación social extraordinaria. Entendemos que debería considerarse su incorporación porque cualquiera en la sociedad puede decir la importancia y el impacto que puede tener una formación de calidad como la de la UNCUYO o cualquier universidad nacional".