La reutilización de mallas antigranizo como material de construcción
Sólo desde mayo de este año, Agrinet recicló 200 hectáreas de cobertura en fincas, equivalentes a la emisión de 326.900 kg de CO2 recuperados . El próximo paso es utilizar ese plástico para la industria textil.
Las industrias comprometidas con el ambiente afrontan el desafío de transformar su modelo de negocios en un sistema más sustentable y sostenible, que incluya acciones en función de este concepto en todas sus etapas de producción. Eso incluye la recuperación de los deshechos derivados justamente de los procesos de manufactura.
Agrinet -empresa mendocina dedicada a la fabricación y comercialización de redes de protección para agricultura intensiva- también ha sido precursora en este sentido.
"Nuestros mallas de polietileno de alta densidad han mostrado una durabilidad de entre 15 y 20 años, pero cuando comenzamos con el recambio nos replanteamos su disposición y tratamiento para evitar malas prácticas usuales, como la quema o el entierro. Una solución rápida hubiera sido transformar esos restos en productos de plástico de primer uso, pero luego se descartan y también contaminan. Y por eso decidimos elegir el camino de agregar valor, pasando de la gestión de residuos a la gestión de recursos y de una economía lineal a una economía circular", relató Agustina Debernardi, gerenta de Relaciones Institucionales y Gestión de Personas de Agrinet.
Así nació el Proyecto Re-conectar, alineado con el propósito de la empresa de reconectar a las personas con una vida sostenible y en base a sus siete valores (confianza, integridad, compromiso, pasión, calidad, cercanía y flexibilidad, y adaptación al cambio) y con el claro objetivo de transformar los deshechos de su proceso productivo que ya cumplieron con su vida útil, en un recurso para fabricar otros productos.
Cada hectárea de malla permite recuperar aproximadamente 500 kg de plástico. A inicios de 2023 se llevó a cabo un trabajo en conjunto con bodegas y productores vitivinícolas, que permitió recuperar 200 ha de coberturas desde mayo, equivalentes a 326.900 kg de CO2 recuperados. La transformación de 100.000 kg de PEHD evita la tala de 557 árboles adultos, evita que 212.325 kg de CO2 lleguen a la atmósfera, implica el ahorro de 233.560.905 litros de agua y que 809 camiones cargados con plástico no sean depositados en la basura. En total, durante los 6 años en Agrinet realizó el reciclado de polietileno, se han transformado 571.000 kilos de ?scrap', lo que ha permitido evitar la emisión de 1.027.926 kg de CO2.
En la primera etapa, Agrinet hizo una alianza con 3C Construcciones, dedicada a la construcción de viviendas y espacios públicos a partir del reciclado de residuos plásticos y que, además, integra a personas vulnerables a sus labores. En este caso, la malla antigranizo se utiliza como barrera de contención de los bloques de plástico que rellenan las estructuras constructivas. Luego, esa pared se revoca como en la construcción tradicional. "Es así como las mallas que se dejan de utilizar en las viñas en Mendoza, se emplean para la edificación de los muros de casas, medianeras, etcétera", explicó Debernardi.
Pero a esa iniciativa se le sumó otra más ambiciosa: utilizar esos residuos para la industria textil. "Estamos investigando, junto a un proveedor de polietileno, cómo transformar las coberturas dadas de baja o degradadas y elaborar pellets de PEHD para hacer textiles que permitan el hilado para indumentarias.
El Proyecto Re-conectar cumple con cinco de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible establecido por la ONU para cumplir al año 2030: trabajo decente y crecimiento económico; industria, innovación e infraestructura; producción y consumo responsables; acción por el clima; alianzas para los objetivos.