Ataque en plena audiencia: intiman al Servicio Penitenciario por un video que no aparece

La forma en la que un peligroso preso ingresó a la sala de audiencias del Polo Judicial con un arma blanca, sigue siendo un misterio. Esto debido a que la Inspección General de Seguridad (IGS), que investiga el hecho, aún no tiene en sus manos el video de la requisa, razón por la que el organismo de control intimó al Servicio Penitenciario, que depende del Gobierno de Mendoza.

Finalmente, la fiscal Ríos habló en público sobre lo ocurrido en el Polo Judicial

El pasado 13 de septiembre, la aparente calma del Polo Judicial se alteró cuando un preso que estaba sentado en una audiencia a la espera de su juicio, Hugo Arredondo (37), sacó de entre sus ropas un arma blanca de fabricación casera con la que intimó a los abogados presentes e intentó huir.

La noticia rápidamente recorrió los portales nacionales porque presuntamente el preso había intentado matar a la fiscal Claudia Ríos. Incluso, se dijo que el atacante intentó apuñalarla en el cuello y que la funcionaria judicial salvó su vida porque justo inclinó su cabeza hacia atrás. Luego, apareció un video que mostró un escenario muy diferente y el hecho, que había sido calificado como "tentativa de homicidio", pasó a "intento de evasión agravada".

Una semana después, la fiscal debió salir a aclarar las dudas, y sostuvo que la mirada del preso Arredondo iba hacia ella, lo que la hizo sentir intimidada y que su vida corría peligro, a pesar de que en las imágenes, el hombre pasa a varios metros de distancia.

La causa del supuesto intento de ataque quedó en manos de Delitos Sexuales, mientras que la Inspección General de Seguridad sigue la investigación sobre la posible connivencia de los penitenciarios que debían custodiar a los detenidos desde la salida de Almafuerte, en Cacheuta, hasta el Polo Judicial. 

Al respecto, más allá de si el preso agredió o no a Ríos, en la IGS, a cargo de Marcelo Puertas, consideran que es de una extrema gravedad que haya ingresado con un arma blanca. 

Mientras tanto, los siete penitenciarios volvieron a trabajar, pero fueron reasignados. Y, a la vez, corren los 30 días que tienen para ofrecer pruebas a la IGS que permitan demostrar la inocencia.

Lo curioso del caso es que, a más de 15 días del ataque, desde el órgano que investiga el accionar de los miembros de las fuerzas de seguridad aún no han podido acceder al video de la requisa que le realizaron a Arredondo cuando abandonó el penal para ir al juicio.

Si bien desde el Servicio Penitenciario aseguraron que el mismo existe, y que está a disposición de la IGS, desde el organismo aseguraron que no lo recibieron. Por esta razón intimaron al SP a presentarlo hasta el próximo viernes, sino lo darán como inexistente, hecho que podría agravar la situación de los penitenciarios y de las autoridades, ya que la filmación de una requisa es obligatoria, tanto para preservar al personal como a los detenidos.