Qué modelos de autos entran en el programa Precios Justos
Tras el acuerdo con el Gobierno, las terminales publicaron los precios de los vehículos que participarán del plan oficial hasta el 31 de octubre. Cuáles son y qué incremento tuvieron contra los valores de agosto
Un día después de que el Gobierno anunció la inclusión de autos en el programa Precios Justos, las automotrices definieron, tras varios días de revisiones y luego de arrancar septiembre sin listas de precios oficiales, el aumento con el que sus vehículos ingresarán al plan oficial que congelará los valores por 60 días. El incremento promedia el 12%, según las listas que llegaron el miércoles a las concesionarias.
Según confirmó el titular de Comercio, Matías Tombolini, las terminales que aceptaron congelar sus precios hasta el 31 de octubre son Volkswagen, Toyota, Ford, Nissan, General Motors, Stellantis (Fiat, Dodge, Peugeot y Citroen) y Renault. A cambio, se liberará un cupo de importaciones a dólar oficial, que las automotrices podrán utilizar para importar vehículos o autopartes.
Los precios de los autos que formarán parte del programa van desde los $ 8 millones hasta los $ 16 millones, en el caso de los modelos más costosos. Si se comparan con los valores de referencia que las terminales habían publicado durante el mes agosto, los incrementos oscilan entre el 6% y el 14 por ciento.
Cuáles son los modelos y los valores de los autos en Precios Justos
Los nueve autos que formarán parte del programa son variados: hay modelos importados, nacionales y pick-ups.
Chevrolet, Nissan, Ford y Renault fueron las primeras terminales en develar cuáles de sus vehículos tendrían el precio congelado. En todos los casos se trata de pick-ups, debido a que, al ser considerados vehículos comerciales, no quedan afectados por ninguna de las dos escalas del impuesto al lujo.
Los modelos son la Montana LTZ -llega importada desde Brasil- y se comercializa a partir de los $ 15 millones, la Frontier en su versión 2.3 4x2 manual -se produce en la planta de Santa Isabel en Córdoba- y su precio comienza en los $ 14 millones, la Ranger XLS 2.0 4x2 manual y de fabricación nacional, saldrá $ 16 millones, y la Alaskan 2.3, también producida en la Argentina, que tendrá un valor aproximado de $15 millones.
La mayor vendedora de autos del mundo, la japonesa Toyota, participará de Precios Justos con el Yaris XLS en su versión de gama media, cuyo precio será de $ 8,8 millones, mientras que, Volkswagen hará lo respectivo con su último lanzamiento: el Polo Track First Edition, que tiene un valor de $ 8,1 millones. Ambos modelos se producen en Brasil.
A pesar de que, a cambio de participar del programa, el Gobierno prometió abrir las importaciones para aquellas terminales que acordaran congelar el precio de sus vehículos, el temor del sector es que, al tratarse de modelos importados, y teniendo en cuenta que hace dos meses que no ingresan autos producidos en el exterior a la Argentina, no haya disponibilidad de unidades en los concesionarios.
La publicación de las listas de precios correspondientes para septiembre se atrasó varios días -suelen darse a conocer el primer día de cada mes- debido a que, aunque estaba previsto que comenzara a regir el primer día del periodo, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) no hacía oficial la actualización del nuevo piso del impuesto interno, también llamado "impuesto al lujo".
Por esta razón, al no estar oficializado, el piso podría variar dependiendo el acuerdo al que llegaran las automotrices con el Gobierno por los Precios Justos.
Sin embargo, la norma se publicó en el Boletín Oficial tras el acuerdo entre las terminales y el Ministerio de Economía. De acuerdo con el estatuto vigente -se mantendrá hasta finales de noviembre-, serán afectados, con el 20% de su valor, aquellos autos que superen los $ 10,5 millones de precio al público. Aquellos que tengan un precio superior a los $19,3 millones serán alcanzados por la segunda escala del impuesto.
No obstante, con el objetivo de evitar que algunos modelos queden afectados por este arancel, muchas terminales ponen diferentes versiones de un mismo modelo a un precio similar al de la versión de entrada de gama para 'topearlo'. Sin embargo, por el exceso de demanda que hoy tiene el mercado, en los salones, se termina vendiendo por montos mayores.