Truchó facturas, renunció a Desarrollo Social y ahora es asesor de Beliz
Se trata de Federico Berardi, quien tenía a su cargo la Secretaria de Primera Infancia y cobraba dinero del Ministerio de Desarrollo Social. Ahora, asesora al Secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz.
El referente de la cooperativa Patria al hombro y Director de Primera Infancia, Federico Berardi, presentó su renuncia dentro del Ministerio de Desarrollo Social. Esto ocurrió luego de que el diario Perfil publicara una investigación sobre ese espacio que él lideraba y por el que recibía fondos de dicho ministerio y truchaba las facturas con gastos fantasmas.
Ahora, se conoció que trabaja dentro de la secretaria de Asuntos Estratégicos de la Nación, que conduce Gustavo Béliz.
"Berardi había quedado muy debilitado luego de que Daniel Arroyo dejara el Ministerio de Desarrollo Social para ser diputado nacional y que su reemplazante, Juan Zabaleta, no diera el visto bueno para que continuara en el cargo con estos antecedentes. Si bien desde dicha cartera niegan haberlo echado, Berardi presentó su renuncia y se fue como asesor del Secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia de la Nación", apunta Perfil.
Siempre según la información de dicho medio, también se pudo conocer que Berardi proviene del mundo eclesiástico. Militó en la Pastoral Social y tuvo un "vínculo estrecho con el Accaputo, muy cercano al Papa Francisco, fue incluso delegado de la Arquidiocésis de la Pastoral Social en la Ciudad de Buenos Aires, cuando Bergoglio era cardenal y Accaputo el segundo".
Su paso por la cooperativa
Tal cual refleja la investigación periodística citada, Berardi habría incluso presidido la cooperativa mediante la cual truchaba facturas a su beneficio. Incluso, su hermano Tomás Berardi figuraba como síndico de la cooperativa, en lo que muchos llamaron un "negocio en familia".
"Lo cierto es que Patria al Hombro estaba inscripta al programa Potenciar Trabajo, de la Secretaría de Economía Social que dirige Emilio Pérsico, para recibir unos 25 millones de pesos del Estado el año pasado. Por lo que pudo saber Perfil, al haber cobrado 12,5 millones de pesos y descubrir que al menos cuatro millones fueron facturados de manera apócrifa, Arroyo adelantó que sería muy difícil que cobraran el resto del dinero, y que, incluso, si la Justicia lo demostrara, podrían terminar devolviendo el dinero", marca el diario nacional.
Y cierra: "Aún no hubo avances en la denuncia que presentó Paula Oliveto al conocerse la investigación, pero sí este medio reveló que el presunto "testaferro" de Berardi, Miguel Romano, el hombre que "sólo ponía a firma" por él, también manejaba la caja de otras cooperativas que a su vez, recibían también dinero no sólo desde el Ministerio de Desarrollo Social, sino específicamente desde la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), una de las áreas que nucleaba la función de Berardi".