Alejandro Gullé

Para el Procurador, además de leer a Zaffaroni, los magistrados deben pensar en la sociedad

El jefe de los fiscales de Mendoza, Alejandro Gullé, habló con Memo y ratificó que "para insertar a una persona hay que pensar también en la sociedad". Cuestionó "los pensamientos de algunos maestros" de Derecho, pero dijo respetar a quienes lo sostienen.

El Procurador General de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, Alejandro Gullé, sostuvo que "poco a poco se van limando las asperezas dentro de la Justicia en torno a los que sostienen teorías ideológicas con respecto a cómo se debe actuar frente a los casos que se abordan". Con sutileza, el máximo referente del Ministerio Público Fiscal, evitó ser directo en torno a la influencia de la agrupación "Justicia Legítima" en Mendoza, que siguen las ideas y doctrinas escritas por Raúl Eugenio Zaffaroni y que han resultado siempre polémicas a la hora de su aplicación.

La explicación de Gullé ante la consulta de Memo llegó a raíz del caso del asesinato de Héctor Osvaldo Quiroga en Maipú, cuyo principal acusado es Cristian Reina González. Precisamente el sospechoso, que fue herido al escapar de la escena del crimen, había sido condenado por robo agravado y debería haber estado encerrado en la cárcel hasta 2021, de no mediar la actuación del entonces juez de Ejecución Penal, Sebastián Sarmiento (adherente a la Doctrina Zaffaroni) que decidió disminuir la pena y permitir su egreso de prisión, a pesar de contar con antecedentes en delitos vinculados a la venta de estupefacientes y abuso sexual.

"Hay que pensar también en la sociedad"

"Los casos de violadores -señaló Gullé- generalmente resulta muy difícil que se readapten". Sobre el caso, subrayó que "es una persona que para reinsertarla socialmente hay que pensar no solo en ella, sino en la sociedad".

"Yo quiero confiar en todos los magistrados, pero son los fiscales que representan a toda la sociedad quienes deben advertir que dejar en libertad a una persona, tienen la opción de oponerse si creen que no están en condiciones", dijo.

Profundizó su opinión en torno al clima interno de los magistrados, responsables de otorgar o no el servicio de Justicia. "Se están limando asperezas -dijo- pero algunos se encuentran identificados con un pensamiento jurídico que no es propio de ellos sino de algunos maestros, Zaffaroni entre otros. Yo no los critico, pero no lo comparto, no me convence. Yo quiero poner en la balanza el interés del ciudadano y lo único irrecuperable es la vida de la persona".

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