La carta de Donald Trump a Nancy Pelosi

El presidente de EE UU adviertió de que el 'impeachment' será contraproducente para los legisladores demócratas en los comicios electorales de 2020

Washington, DC, a 17 de diciembre del 2019

A la honorable Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes

Estimada presidenta:

Le escribo para expresar mi protesta más contundente y poderosa en oposición a la cruzada partidista de juicio político que está siendo impulsada por los demócratas en la Cámara de Representantes. Este proceso representa un abuso de poder inconstitucional y sin precedentes por parte de los legisladores demócratas, sin igual en dos siglos y medio de historial legislativo estadounidense.

Las imputaciones para un juicio político presentadas por la comisión de procesos jurídicos no son reconocibles bajo ningún estándar de teorías ni interpretaciones constitucionales, ni jurisprudencia. No incluyen delito, fechoría ni ofensa alguna. ¡Le han rebajado su importancia a la horrenda palabra de impeachment!

Al proseguir con su inválido procedimiento, están violando sus juramentos, están rompiendo con su lealtad a la Constitución y están declarando una guerra abierta en contra de la democracia estadounidense. Se atreven a invocar los nombres de los padres fundadores en su maniobra para anular las elecciones cuando sus acciones rencorosas demuestran un desprecio sin límites hacia el proceso fundacional de Estados Unidos y mientras su conducta atroz amenaza con destruir justamente aquello que los padres fundadores dedicaron sus vidas para construir.

Peor que la ofensa a los padres fundadores es la afrenta a los estadounidenses fieles al decir reiteradamente "Rezo por el presidente", a sabiendas de que no es cierta su expresión a menos que la digan con connotación negativa. Es terrible lo que están haciendo, pero ¡ustedes tendrán que vivir con ello y no yo!

Su primer cargo, de "abuso de poder", es una invención insincera, sin fundamentos, sin mérito, producto de su imaginación. Saben que tuve una conversación completamente inocente con el presidente de Ucrania. Después tuve una segunda conversación que ha sido citada incorrectamente, tergiversada y representada erróneamente de manera fraudulenta. Afortunadamente fue tomada una transcripción de la conversación, y saben por esa transcripción (que de inmediato hicimos disponible) que el párrafo en cuestión fue intachable. Le dije al presidente [Volodímir] Zelensky: "Me gustaría que nos hiciera un favor, empero, porque nuestro país ha padecido mucho y Ucrania bien lo sabe". Dije que nos hiciera un favor, no que me hiciera un favor, y que lo hiciera al país no a una campaña. Luego hice mención del procurador general de Estados Unidos. Cada vez que hablo con un líder extranjero pongo primero los intereses de Estados Unidos, como hice con el presidente Zelensky.

Está creando de un desacuerdo respecto a políticas entre dos ramas del Gobierno una ofensa enjuiciable y eso no es tanto más legítimo que si el poder ejecutivo imputara a integrantes del Congreso delitos por ejercer legalmente su poder legislativo.

Saben muy bien que el vicepresidente Biden aprovechó el poder de su cargo y 1.000 millones de dólares en fondos de ayuda estadounidense para forzar a Ucrania a despedir al procurador que estaba indagando a la empresa que le pagaba millones de dólares a su hijo. Lo saben porque [Joe] Biden lo presumió en un vídeo. Biden dijo sin tapujos: "Les dije: ‘no van a conseguir los miles de millones' ... Volví a verlos y dije: ‘Me voy en seis horas. Si no despiden al procurador no les llegará el dinero'. Pues, vaya, lo despidieron". Ahora me quieren enjuiciar a mí al acusarme en falso de hacer lo que Joe Biden ha admitido que él hizo.

El presidente Zelensky ha dicho varias veces que yo no hice nada y que no hubo presiones. También hizo énfasis en que fue "una buena llamada", que él "no sintió presión", y dijo explícitamente: "nadie me dio un empujón". El canciller ucraniano declaró claramente: "Nunca he visto un vínculo directo entre las investigaciones y la asistencia en materia de seguridad". También dijo que "no hubo presión". El senador Ron Johnson, de Wisconsin, simpatizante de Ucrania que se reunió en privado con el presidente Zelensky, ha dicho que: "En ningún momento en esa reunión... hubo mención alguna por parte de Zelensky o cualquier ucraniano de que se sintieron bajo presión de hacer algo a cambio de la asistencia militar". Ha habido muchas reuniones entre representantes de Ucrania y de nuestro país. Ni una sola vez se quejó Ucrania de que se le ejerciera presión, ¡ni una sola! El embajador Sondland testificó lo que yo le dije: "No hubo quid pro quo. No quiero nada. No quiero nada. Le dije al presidente Zelensky que hiciera lo correcto y que cumpliera promesas de campaña".

El segundo cargo, la presunta "obstrucción al Congreso", es absurdo y peligroso. Los demócratas de la Cámara baja quieren enjuiciar al presidente legítimamente electo de Estados Unidos por ejercer privilegios basados en la Constitución y que han sido ejercidos de manera bipartidista por Gobiernos previos de ambos partidos a lo largo de la historia de nuestro país. Con ese estándar, cualquier presidente estadounidense habría sido enjuiciado varias veces. Como advirtió el profesor de Derecho Jonathan Turley, de corte liberal, cuando compareció ante los demócratas del Congreso: "No puedo recalcar más esto: si enjuician a un presidente, si hacen que los delitos de responsabilidad no se atiendan en los tribunales, eso es un abuso de poder. Es su abuso de poder. Estarán haciendo exactamente lo que critican que hizo el presidente".

Todos, incluida usted, saben qué está pasando aquí en realidad. Su candidata [Hillary Clinton] perdió las elecciones en 2016, con una golpiza en el Colegio Electoral (306 a 227), y ustedes y su partido no se recuperaron de la derrota. Han desarrollado un caso abarcador a partir de lo que muchos en los medios llaman el síndrome de Desequilibrio de Trump y, tristemente, ¡nunca lo van a superar! Están indispuestos y son incapaces de aceptar el veredicto que surgió de las urnas durante las grandes elecciones de 2016. Así que han pasado tres años seguidos intentando socavar la voluntad del pueblo estadounidense y anular sus votos. ¡Consideran a la democracia como su enemiga!

Presidenta Pelosi, admitió apenas la semana pasada en un foro público que el esfuerzo por enjuiciar de su partido ha durado "dos años y medio", mucho antes de que se enteraran que hubo una llamada telefónica con Ucrania. 19 minutos después de que asumí el juramento, The Washington Post publicó una noticia con el titular: "La campaña para enjuiciar al presidente Trump comienza". Menos de tres meses después de mi toma de protesta, la representante Maxine Waters dijo: "Voy a pelear cada día hasta que sea enjuiciado". Los demócratas de la Cámara baja presentaron la primera propuesta de juicio político en mi contra apenas unos meses después de mi toma de protesta, por la que será considerada una de las mejores decisiones de este país, el despido de James Comey (véase los reportes del inspector general), quien el mundo ahora sabe es uno de los policías más corruptos que ha vivido en nuestro país. Una representante que despotrica y desvaría, Rashida Tlaib, declaró unas horas después de asumir su cargo: "Vamos a entrar y vamos a enjuiciar al hijo de ****". El representante Al Green dijo en mayo: "Me preocupa si no enjuiciamos a este presidente, que será reelegido". De nuevo, usted y sus aliados dijeron e hicieron todas estas cosas antes de enterarse de algo del presidente Zelensky o de cualquier cosa relacionada con Ucrania. Como sabe bien, este impulso por enjuiciar no tiene nada que ver con Ucrania ni con la conversación completamente apropiada que tuve con su nuevo presidente. ¡Solamente tiene que ver con su intento de deshacer las elecciones de 2016 y con robar las elecciones de 2020!

El congresista Adam Schiff hizo trampa y mintió varias veces hasta la fecha, inventándose incluso, de manera fraudulenta de la nada, mi conversación con el presidente Zelensky de Ucrania; leyó su palabras fantasiosas al Congreso como si las hubiera dicho yo. Sus mentiras y decepciones sin pudor, que empiezan con el engaño sobre Rusia, es una de las principales razones por las que estamos donde estamos hoy.

Usted y su partido están desesperados por distraer del extraordinario estado económico del país, del gran auge de trabajo, de los niveles históricos de las Bolsas, de una creciente confianza y de ciudadanos que prosperan. Su partido simplemente no puede competir con nuestro récord: siete millones de empleos nuevos; el nivel de desempleo más bajo para estadounidenses negros, hispanos y asiáticos; un Ejército reconstruido; una asociación para veteranos reformada por completo con poder de elección y rendición de cuentas para con nuestros grandiosos veteranos; más de 170 jueces federales y dos magistrados de la Corte Suprema; recortes históricos en impuestos y regulaciones; la eliminación del mandato individual del seguro de gastos médicos; la primera caída en precios de medicamentos de receta en medio siglo; el primer nuevo brazo de las Fuerzas Armadas desde 1947, la Fuerza Espacial; una fuerte protección a la Segunda Enmienda; reforma de la justicia penal; la derrota del califato del Estado Islámico y la matanza del líder terrorista número uno del mundo, Al-Baghdadi; el reemplazo del desastroso acuerdo comercial TLCAN con el maravilloso T-MEC (con México y Canadá); un hito de acuerdo comercial en fase uno con China; grandes nuevos pactos comerciales con Japón y Corea del Sur; el retiro del terrible acuerdo nuclear con Irán; la cancelación de los injustos y costosos Acuerdos Climáticos de París; volvernos a ser el principal productor energético del mundo; reconocer la capital israelí para abrir la Embajada estadounidense en Jerusalén, y el reconocimiento de la soberanía israelí en los Altos del Golán; una reducción colosal de los cruces fronterizos ilegales, el fin de la política de capturar y liberar y la construcción del muro fronterizo: eso es solo un principio y hay mucho más por enumerar. No pueden defender sus políticas extremas -de fronteras abiertas, migración en masa, tasas de delincuencia altas, un sistema de salud socializado, la destrucción de la industria energética estadounidense, abortos tardíos pagados por los contribuyentes, la eliminación de la Segunda Enmienda, teorías de leyes y justicia de ultraizquierda y la obstrucción partidista constante al bien común y del sentido común.

No hay nada que prefiriera hacer que dejar de referirme a su partido como los Demócratas que No Hacen Nada. Desafortunadamente, no creo que me den la oportunidad de hacerlo.

Tras tres años de investigaciones injustas y sin fundamentos, con 45 millones de dólares gastados, 18 fiscales demócratas enfurecidos, toda la fuerza del FBI cuando tenía un liderazgo comprobadamente incompetente y corrupto, ¡no han encontrado NADA! Pocas personas en puestos tan altos han sobrellevado o pasado tales pruebas. No saben ni les importa el daño enorme y el dolor al que han sometido a los integrantes maravillosos y cariñosos de mi familia. Ya realizaron una investigación falsa en contra del presidente de Estados Unidos y ahora lo están haciendo de nuevo.

Hay pocas personas que puedan haber lidiado con el castigo impuesto en este tiempo a la vez que hacen tanto para que Estados Unidos y sus ciudadanos tengan éxito. Pero en vez de poner primero al país, han decidido dañar aún más a nuestra nación. Fracasaron completamente con el reporte de Mueller porque no había nada qué encontrar, así que decidieron tomar el siguiente engaño en su camino, la llamada con Ucrania, a pesar de que fue una llamada perfecta. Y, por cierto, cuando hablo con países extranjeros hay muchas personas presentes, con permiso en ambos lados, para escuchar la llamada.

Ustedes son quienes interfieren con las elecciones estadounidenses. Ustedes son quienes socavan la democracia estadounidense. Ustedes son quienes obstruyen la justicia. Ustedes son los que aquejan con dolor y sufrimiento a nuestra república por beneficios personales, políticos y partidistas.

Antes de la farsa del enjuiciamiento, fue la cacería de brujas rusa. A pesar de la evidencia al contrario, y a pesar de la verdad, usted y sus representantes aseguraron que mi campaña estaba coludida con los rusos; una mentira grave, maliciosa y difamatoria, una falsedad como ninguna otra. Forzaron a nuestro país a estar agitado y afligido debido a una historia completamente fabricada, que fue comprada de manera ilegal a un espía extranjero de Hillary Clinton y al Comité Nacional Demócrata para abusar de nuestra democracia. Sin embargo, cuando se desmintió su engaño monstruoso y la conspiración demócrata se disolvió como polvo no se disculparon. No se retractaron. No pidieron ser perdonados. No mostraron remordimiento ni una capacidad de reflexión. En vez de eso persiguieron su siguiente cruzada difamatoria y viciosa; fabricaron un intento para calumniar e incriminar a una persona inocente. Todo esto fue motivado por cálculos políticos personales. Su presidencia y su partido son rehenes de los representantes más radicales y desquiciados de la izquierda extrema. Cada uno de sus miembros tiene terror de enfrentarse a un contrincante socialista en sus primarias; eso es lo que impulsa el juicio político. Mire al posible rival del representante Nadler. Mire su propio caso y el de otros. No hundan al país junto con su partido.

Si realmente le importara la libertad para nuestra nación, entonces dedicarían sus amplios recursos investigativos a exponer la verdad real de los abusos de poder horripilantes del FBI antes, durante y después de las elecciones de 2016, incluidos el uso de espías en contra de mi campaña, la presentación de evidencias falsas frente a una corte sobre vigilancia extranjera (FISA) y el encubrimiento de pruebas exculpatorias con tal de incriminar a los inocentes. El FBI tiene a personas grandiosas y honradas, pero su liderazgo era inepto y corrupto. Pensaría que les conmocionan personalmente estas revelaciones, porque en su conferencia de prensa el día en que anunciaron que avanzaría el juicio político dijo que ese esfuerzo estaba vinculado directamente al Engaño sobre Rusia desacreditado; declaró en dos ocasiones que "todos los caminos llevan a Putin", a pesar de que sabe que esa es una mentira rotunda. He sido más duro con Rusia que lo que el presidente Obama ni consideró ser.

Cualquier integrante del Congreso que vote a favor de enjuiciar -pese a la verdad, a todos los hechos, evidencias y principios legales- demuestra cómo desprecia a los votantes y cómo realmente detesta el orden constitucional estadounidense. Nuestros padres fundadores temían el tribalismo de la política partidista y ustedes están cumpliendo esos peores temores.

Lo que es peor, a mí me han dejado sin el debido proceso constitucional desde el primer momento de esta estafa de juicio político y hasta la fecha. Me han negado los derechos más fundamentales que otorga la Constitución, incluyendo el derecho a presentar evidencias, a tener presente a mi defensa, a confrontar a quienes me acusan y a convocar a testigos para también cuestionarlos, como al así llamado delator que empezó todo este engaño con un reporte falso de la llamada telefónica, que no tiene relación alguna con cómo fue en realidad la conversación. Ya que presenté la transcripción, que sorprendió y sacudió a los estafadores (que nunca pensaron que se presentaría la evidencia), el así llamado delator, y un segundo supuesto delator, desaparecieron porque los habían cogido en la mentira de que el reporte era fraudulento. Y de repente ya no teníamos acceso a ellos. En otras palabras, cuando se hizo público el contenido de la llamada se deshizo todo su entramado, pero eso no los detuvo de seguir con él.

Les dieron más acceso al debido proceso a quienes fueron acusados en los juicios de Salem por brujería.

Usted y otros en sus comisiones han dicho desde hace tiempo que el juicio político debe ser bipartidista, pero no lo es. Ustedes dijeron que era muy divisivo -sin duda lo es, más de lo que ustedes creyeron posible- ¡y solamente empeorará!

Esto no es más que un intento de golpe de Estado ilegal y partidista que, si nos basamos en el sentir popular reciente, fracasará en las urnas. No solamente están tras de mí, como el presidente, sino tras de todo el Partido Republicano. Pero, debido a esta injusticia colosal, nuestro partido está más unido de lo que había estado nunca. La historia los juzgará duramente conforme procedan con esta estafa de enjuiciamiento. Su legado será el de convertir a la Cámara de Representantes, un cuerpo legislativo respetado, en la Cámara estrellada de calumnia para la persecución partidista.

Posiblemente el mayor insulto es que se muestran solemnes, falsamente. Aparentemente respetan tan poco al pueblo estadounidense que esperan que les crean que están tratando este proceso de manera solemne, reticente, reservada. Ninguna persona inteligente les cree. Desde el momento en que gané las elecciones el Partido Demócrata ha estado viviendo la fiebre del enjuiciamiento. No hay reticencia alguna. Este no es un asunto serio. Están burlándose del proceso de juicio político y ni siquiera están escondiendo su odio hacia mí, hacia el Partido Republicano y hacia decenas de millones de estadounidenses patriotas. Los votantes son sagaces y ven más allá de este juego peligroso, vacuo y demacrado que están jugando.

No tengo duda alguna de que el pueblo estadounidense les hará a usted y a todos los demócratas rendir cuentas en las próximas elecciones de 2020. No olvidarán pronto su perversión de la justicia y sus abusos de poder.

Hay tanto que se necesita hacer para mejorar la vida de nuestros ciudadanos. Es momento para que usted y los demócratas ultrapartidistas del Congreso cesen de inmediato esta fantasía de enjuiciar y vuelvan a ponerse a trabajar por el pueblo estadounidense. No tengo expectativa alguna de que lo hagan, por ello escribo esta carta para registro histórico y para plasmar mis pensamientos de manera permanente e indeleble.

Dentro de 100 años, cuando la gente recuerde este asunto, quiero que lo entienda y que aprenda de él para que nunca más le vuelva a suceder a un presidente.

Lo saluda atentamente,

Donald J. Trump

Presidente de Estados Unidos de América

Con copia a: El Senado de Estados Unidos y la Cámara de Representantes de Estados Unidos.

Traducción de Marina E. Franco para El País. MÁS de la cobertura de ese diario, haciendo clic aquí.

El texto original en inglés:

December 17, 2019

The Honorable Nancy Pelosi

Speaker of the House of Representatives

Washington, D.C. 20515

Dear Madam Speaker:

I write to express my strongest and most powerful protest against the partisan impeachment crusade being pursued by the Democrats in the House of Representatives. This impeachment represents an unprecedented and unconstitutional abuse of power by Democrat Lawmakers, unequaled in nearly two and a half centuries of American legislative history.

The Articles of Impeachment introduced by the House Judiciary Committee are not recognizable under any standard of Constitutional theory, interpretation, or jurisprudence. They include no crimes, no misdemeanors, and no offenses whatsoever. You have cheapened the importance of the very ugly word, impeachment!

By proceeding with your invalid impeachment, you are violating your oaths of office, you are breaking your allegiance to the Constitution, and you are declaring open war on American Democracy. You dare to invoke the Founding Fathers in pursuit of this election-nullification scheme-yet your spiteful actions display unfettered contempt for America's founding and your egregious conduct threatens to destroy that which our Founders pledged their very lives to build. Even worse than offending the Founding Fathers, you are offending Americans of faith by continually saying "I pray for the President," when you know this statement is not true, unless it is meant in a negative sense. It is a terrible thing you are doing, but you will have to live with it, not I!

Your first claim, "Abuse of Power," is a completely disingenuous, meritless, and baseless invention of your imagination. You know that I had a totally innocent conversation with the President of Ukraine. I then had a second conversation that has been misquoted, mischaracterized, and fraudulently misrepresented. Fortunately, there was a transcript of the conversation taken, and you know from the transcript (which was immediately made available) that the paragraph in question was perfect. I said to President Zelensky: "I would like you to do us a favor, though, because our country has been through a lot and Ukraine knows a lot about it." I said do us a favor, not me, and our country, not a campaign. I then mentioned the Attorney General of the United States. Every time I talk with a foreign leader, I put America's interests first, just as I did with President Zelensky.

You are turning a policy disagreement between two branches of government into an impeachable offense-it is no more legitimate than the Executive Branch charging members of Congress with crimes for the lawful exercise of legislative power.

You know full well that Vice President Biden used his office and $1 billion dollars of U.S. aid money to coerce Ukraine into firing the prosecutor who was digging into the company paying his son millions of dollars. You know this because Biden bragged about it on video. Biden openly stated: "I said, ‘I'm telling you, you're not getting the billion dollars' ... I looked at them and said: ‘I'm leaving in six hours. If the prosecutor is not fired, you're not getting the money.' Well, son of a bitch. He got fired." Even Joe Biden admitted just days ago in an interview with NPR that it "looked bad." Now you are trying to impeach me by falsely accusing me of doing what Joe Biden has admitted he actually did.

President Zelensky has repeatedly declared that I did nothing wrong, and that there was No Pressure. He further emphasized that it was a "good phone call," that "I don't feel pressure," and explicitly stressed that "nobody pushed me." The Ukrainian Foreign Minister stated very clearly: "I have never seen a direct link between investigations and security assistance." He also said there was "No Pressure." Senator Ron Johnson of Wisconsin, a supporter of Ukraine who met privately with President Zelensky, has said: "At no time during this meeting ... was there any mention by Zelensky or any Ukrainian that they were feeling pressure to do anything in return for the military aid." Many meetings have been held between representatives of Ukraine and our country. Never once did Ukraine complain about pressure being applied-not once! Ambassador Sondland testified that I told him: "No quid pro quo. I want nothing. I want nothing. I want President Zelensky to do the right thing, do what he ran on."

The second claim, so-called "Obstruction of Congress," is preposterous and dangerous. House Democrats are trying to impeach the duly elected President of the United States for asserting Constitutionally based privileges that have been asserted on a bipartisan basis by administrations of both political parties throughout our Nation's history. Under that standard, every American president would have been impeached many times over. As liberal law professor Jonathan Turley warned when addressing Congressional Democrats: "I can't emphasize this enough .. .if you impeach a president, if you make a high crime and misdemeanor out of going to the courts, it is an abuse of power. It's your abuse of power. You're doing precisely what you're criticizing the President for doing."

Everyone, you included, knows what is really happening. Your chosen candidate lost the election in 2016, in an Electoral College landslide (306-227), and you and your party have never recovered from this defeat. You have developed a full-fledged case of what many in the media call Trump Derangement Syndrome and sadly, you will never get over it! You are unwilling and unable to accept the verdict issued at the ballot box during the great Election of 2016. So you have spent three straight years attempting to overturn the will of the American people and nullify their votes. You view democracy as your enemy!

Speaker Pelosi, you admitted just last week at a public forum that your party's impeachment effort has been going on for "two and a half years," long before you ever heard about a phone call with Ukraine. Nineteen minutes after I took the oath of office, the Washington Post published a story headlined, "The Campaign to Impeach President Trump Has Begun." Less than three months after my inauguration, Representative Maxine Waters stated, "I'm going to fight every day until he's impeached." House Democrats introduced the first impeachment resolution against me within months of my inauguration, for what will be regarded as one of our country's best decisions, the firing of James Comey (see Inspector General Reports)-who the world now knows is one of the dirtiest cops our Nation has ever seen. A ranting and raving Congresswoman, Rashida Tlaib, declared just hours after she was sworn into office, "We're gonna go in there and we're gonna impeach the motherfl'***r." Representative Al Green said in May, "I'm concerned that if we don't impeach this president, he will get re-elected." Again, you and your allies said, and did, all of these things long before you ever heard of President Zelensky or anything related to Ukraine. As you know very well, this impeachment drive has nothing to do with Ukraine, or the totally appropriate conversation I had with its new president. It only has to do with your attempt to undo the election of 2016 and steal the election of 2020!

Congressman Adam Schiff cheated and lied all the way up to the present day, even going so far as to fraudulently make up, out of thin air, my conversation with President Zelensky of Ukraine and read this fantasy language to Congress as though it were said by me. His shameless lies and deceptions, dating all the way back to the Russia Hoax, is one of the main reasons we are here today.

You and your party are desperate to distract from America's extraordinary economy, incredible jobs boom, record stock market, soaring confidence, and flourishing citizens. Your party simply cannot compete with our record: 7 million new jobs; the lowest-ever unemployment for African Americans, Hispanic Americans, and Asian Americans; a rebuilt military; a completely reformed VA with Choice and Accountability for our great veterans; more than 170 new federal judges and two Supreme Court Justices; historic tax and regulation cuts; the elimination of the individual mandate; the first decline in prescription drug prices in half a century; the first new branch of the United States Military since 1947, the Space Force; strong protection of the Second Amendment; criminal justice reform; a defeated ISIS caliphate and the killing of the world's number one terrorist leader, al-Baghdadi; the replacement of the disastrous NAFTA trade deal with the wonderful USMCA (Mexico and Canada); a breakthrough Phase One trade deal with China; massive new trade deals with Japan and South Korea; withdrawal from the terrible Iran Nuclear Deal; cancellation of the unfair and costly Paris Climate Accord; becoming the world's top energy producer; recognition of lsrael's capital, opening the American Embassy in Jerusalem, and recognizing Israeli sovereignty over the Golan Heights; a colossal reduction in illegal border crossings, the ending of Catch-and-Release, and the building of the Southern Border Wall-and that is just the beginning, there is so much more. You cannot defend your extreme policies-open borders, mass migration, high crime, crippling taxes, socialized healthcare, destruction of American energy, late-term taxpayer-funded abortion, elimination of the Second Amendment, radical far-left theories of law and justice, and constant partisan obstruction of both common sense and common good.

There is nothing I would rather do than stop referring to your party as the Do-Nothing Democrats. Unfortunately, I don't know that you will ever give me a chance to do so.

After three years of unfair and unwarranted investigations, 45 million dollars spent, 18 angry Democrat prosecutors, the entire force of the FBI, headed by leadership now proven to be totally incompetent and corrupt, you have found NOTHING! Few people in high position could have endured or passed this test. You do not know, nor do you care, the great damage and hurt you have inflicted upon wonderful and loving members of my family. You conducted a fake investigation upon the democratically elected President of the United States, and you are doing it yet again.

There are not many people who could have taken the punishment inflicted during this period of time, and yet done so much for the success of America and its citizens. But instead of putting our country first, you have decided to disgrace our country still further. You completely failed with the Mueller report because there was nothing to find, so you decided to take the next hoax that came along, the phone call with Ukraine--even though it was a perfect call. And by the way, when I speak to foreign countries, there are many people, with permission, listening to the call on both sides of the conversation.

You are the ones interfering in America's elections. You are the ones subverting America's Democracy. You are the ones Obstructing Justice. You are the ones bringing pain and suffering to our Republic for your own selfish personal, political, and partisan gain.

Before the Impeachment Hoax, it was the Russian Witch Hunt. Against all evidence, and regardless of the truth, you and your deputies claimed that my campaign colluded with the Russians-a grave, malicious, and slanderous lie, a falsehood like no other. You forced our Nation through turmoil and torment over a wholly fabricated story, illegally purchased from a foreign spy by Hillary Clinton and the DNC in order to assault our democracy. Yet, when the monstrous lie was debunked and this Democrat conspiracy dissolved into dust, you did not apologize. You did not recant. You did not ask to be forgiven. You showed no remorse, no capacity for self-reflection. Instead, you pursued your next libelous and vicious crusade-you engineered an attempt to and defame an innocent person. All of this was motivated by personal political calculation. Your Speakership and your party are held hostage by your most deranged and radical representatives of the far left. Each one of your members lives in fear of a socialist primary challenger-this is what is driving impeachment. Look at Congressman Nadler's challenger. Look at yourself and others. Do not take our country down with your party.

If you truly cared about freedom and liberty for our Nation, then you would be devoting your vast investigative resources to exposing the full truth concerning the FBI's horrifying abuses of power before, during, and after the 2016 election-including the use of spies against my campaign, the submission of false evidence to a FISA court, and the concealment of exculpatory evidence in order to the innocent. The FBI has great and honorable people, but the leadership was inept and corrupt. I would think that you would personally be appalled by these revelations, because in your press conference the day you announced impeachment, you tied the impeachment effort directly to the completely discredited Russia Hoax, declaring twice that "all roads lead to Putin," when you know that is an abject lie. I have been far tougher on Russia than President Obama ever even thought to be.

Any member of Congress who votes in support of impeachment-against every shred of truth, fact, evidence, and legal principle-is showing how deeply they revile the voters and how truly they detest America's Constitutional order. Our Founders feared the tribalization of partisan politics, and you are bringing their worst fears to life.

Worse still, I have been deprived of basic Constitutional Due Process from the beginning of this impeachment scam right up until the present. I have been denied the most fundamental rights afforded by the Constitution, including the right to present evidence, to have my own counsel present, to confront accusers, and to call and cross-examine witnesses, like the so-called

whistle blower who started this entire hoax with a false report of the phone call that bears no relationship to the actual phone call that was made. Once I presented the transcribed call, which surprised and shocked the fraudsters (they never thought that such evidence would be presented), the so-called whistleblower, and the second whistleblower, disappeared because they got caught, their report was a fraud, and they were no longer going to be made available to us. In other words, once the phone call was made public, your whole plot blew up, but that didn't stop you from continuing.

More due process was afforded to those accused in the Salem Witch Trials.

You and others on your committees have long said impeachment must be bipartisan-it is not. You said it was very divisive-it certainly is, even far more than you ever thought possible-and it will only get worse!

This is nothing more than an illegal, partisan attempted coup that will, based on recent sentiment, badly fail at the voting booth. You are not just after me, as President, you are after the entire Republican Party. But because of this colossal injustice, our party is more united than it has ever been before. History will judge you harshly as you proceed with this impeachment charade. Your legacy will be that of turning the House of Representatives from a revered legislative body into a Star Chamber of partisan persecution.

Perhaps most insulting of all is your false display of solemnity. You apparently have so little respect for the American People that you expect them to believe that you are approaching this impeachment somberly, reservedly, and reluctantly. No intelligent person believes what you are saying. Since the moment I won the election, the Democrat Party has been possessed by Impeachment Fever. There is no reticence. This is not a somber affair. You are making a mockery of impeachment and you are scarcely concealing your hatred of me, of the Republican Party, and tens of millions of patriotic Americans. The voters are wise, and they are seeing straight through this empty, hollow, and dangerous game you are playing.

I have no doubt the American people will hold you and the Democrats fully responsible in the upcoming 2020 election. They will not soon forgive your perversion of justice and abuse of power.

There is far too much that needs to be done to improve the lives of our citizens. It is time for you and the highly partisan Democrats in Congress to immediately cease this impeachment fantasy and get back to work for the American People. While I have no expectation that you will do so, I write this letter to you for the purpose of history and to put my thoughts on a permanent and indelible record.

One hundred years from now, when people look back at this affair, I want them to understand it, and learn from it, so that it can never happen to another President again.

Sincerely yours,

Donald J. Trump

Esta nota habla de: